Conservación del cannabis
¿Qué factores influyen en la conservación o la degradación del cannabis? ¿Cuánto tiempo puede guardarse sin que pierda sus propiedades?
La degradación de los cannabinoides viene determinada por cuatro elementos ambientales que atacan a los compuestos químicos: el aire, la humedad, la temperatura y la luz. Cuando los cannabinoides están en contacto con el oxígeno, este los va destruyendo poco a poco. Se puede evitar el problema envasando los cogollos en recipientes herméticos o, mejor aún, al vacío. Hoy en día se venden envasadoras al vacío domésticas que resultan muy adecuadas para el autocultivador de cannabis. Los cogollos envasados al vacío y conservados a la temperatura ambiente de una casa pueden durar en muy buenas condiciones de uno a dos años. El cannabis secado correctamente tiene entre un 10 y un 12% de humedad, lo que lo mantiene a salvo de los hongos, que no crecen si la humedad está por debajo del 15%. Es muy importante no almacenar la hierba hasta que se haya secado completamente. El calor acelera los procesos biológicos, y la degradación de los cannabinoides no es una excepción. Cuanto menor sea la temperatura de conservación, más durarán las propiedades del cannabis. En condiciones frías (cinco o diez grados), el cannabis aguanta mucho, puede pasar un año sin perder casi nada. Por último, si se congela, la degradación prácticamente se detiene y las propiedades se mantendrían casi inalteradas durante años. Las radiaciones solares atacan los cannabinoides y contribuyen a su degradación. La luz es perjudicial para la conservación de la marihuana y del hachís. Siempre se deben guardar los cogollos en recipientes opacos a la luz o dentro de cajones o armarios.