No hay guerra sin uso de sustancia psicoactivas y la de Ucrania no es una excepción. Por las trincheras corren viejos conocidos de todos los conflictos: metanfetaminas para “subir” y cannabis para “bajar”, pero también drogas sintéticas, algunas de las cuales comienzan a estar también presentes en los mercados europeos. Tanto el ejército ruso como el ucraniano intentan limitar su consumo, pero a...