Los problemas de cortes en el suministro eléctrico que ocasionan las plantaciones ilegales se deben, como bien imaginas, a su enorme tamaño. No es infrecuente que una plantación clandestina comercial tenga varias docenas de lámparas y consuma 30 o 40 kW/h, más o menos lo mismo que consumen cien viviendas. Hay plantaciones ilegales que consumen mucho más, sobre todo si están en grandes naves industriales. Si se concentran muchas de estas plantaciones en un mismo barrio, pueden doblar o triplicar el consumo previsto para todo el barrio, haciendo que la infraestructura eléctrica sea insuficiente, y por eso se producen los cortes de luz.

Para iluminar un armario de cultivo 100x100 cm o 120x120 cm, que son las medidas más habituales entre los autocultivadores domésticos, se suelen usar lámparas de como mucho 600 W si son de alta presión de sodio. Empleando lámparas led, se puede bajar el consumo a 300 o 400 W.

He calculado el gasto fijándome en mi última factura, en la que el importe por potencia contratada es de 0,13 € diarios por kW, la energía consumida se cobra a un precio por kW/h de 0,16 €, un 5,11% de impuesto de electricidad y un IVA del 21%. Según la tarifa que tenga cada uno, el coste final puede variar un poco, pero no debería cambiar demasiado. En cualquier caso, considera los siguientes valores no como una cifra exacta, sino como un coste aproximado.

En la fase de crecimiento, cuando las lámparas deben estar encendidas 18 h al día, el consumo total mensual de una lámpara de 600 W es de unos 67 €, 45 € para una de 400 W y 34 € para una de 300 W. En la fase de floración, las lámparas solo se encienden 12 h al día y el coste mensual baja proporcionalmente: 45 € por 600 W, 30 € por 400 W y 22,5 € por 300 W. Teniendo en cuenta que la cosecha media dura unos tres meses, de los que uno es de crecimiento y dos de floración, el coste total por cosecha será de 157 € con una lámpara de 600 W, 105 € con una de 400 W y 79 € con una de 300 W.