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¿Debo trasplantar?

Tengo tres plantas en macetas de unos diez litros y ya tienen algo más de un metro de altura, ¿tengo que trasplantarlas?, ¿es necesario?, ¿por qué no basta con abonar más?

Maite

Para una planta de cannabis es muy distinto crecer en el suelo que en una maceta. Las macetas, aun las grandes, tienen poca tierra. Las raíces de una planta sembrada en el suelo pueden crecer en cualquier dirección en busca de agua y nutrientes, por lo que no dependen tanto de lo que el cultivador les suministre. En cambio, en una maceta la planta solo puede absorber aquellos elementos que estén en el sustrato.

Generalmente, los minerales presentes en una tierra preabonada se agotan en dos o tres semanas y es necesario reponerlos con abonos líquidos. Pocas semanas después de la germinación y por grande que sea el tiesto, las raíces tocarán con las paredes de la maceta y no pudiendo alejarse más de la planta tendrán que girar y comenzar a crecer alrededor de esta. Si la planta es muy grande y la maceta demasiado pequeña, las raíces no son capaces de absorber todos los nutrientes necesarios. Aunque abonaras mucho y muy a menudo, llega un momento en que las raíces están absorbiendo el máximo de su capacidad, ya no pueden chupar más y hacen falta aún más raíces para nutrir suficientemente a la planta.

¿Debo transplantar?

Siempre que una maceta se quede pequeña para una planta conviene trasplantarla a otra mayor. Como regla general se puede calcular que una planta en exterior necesita entre cinco y diez litros de tierra por cada treinta centímetros de altura, es decir, de quince a treinta litros para una planta de un metro y de treinta a sesenta litros para una de dos metros. Los trasplantes se deben realizar por la tarde, para que las plantas puedan recuperarse durante la noche antes de enfrentarse a las altas temperaturas del día. Hay quien mantiene las plantas recién trasplantadas a la sombra durante un par de días; no es una mala idea. El riego con vitamina B1 ayuda a reducir el shock derivado del trasplante.

Es conveniente usar para los trasplantes el mismo tipo de tierra en que están creciendo las plantas para que las raíces no noten demasiado el cambio. La operación de trasplante se debe hacer con rapidez, pues las raíces sufren cuando están al aire. La tierra se debe apelmazar ligeramente para que no queden huecos y regar a continuación abundantemente. Las plantas trasplantadas empiezan inmediatamente a colonizar el nuevo sustrato y suelen pegar un gran estirón en poco tiempo. Las raíces de las plantas que viven en macetas grandes sufren mucho menos con los calores veraniegos y tienen el suministro de agua garantizado incluso en los momentos más tórridos. Por último, el mayor peso de los tiestos da estabilidad a la planta y evita que los vientos la tumben.

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