La densidad de plantación es un importante factor del cultivo que se debe meditar según el tipo de plantación. Lo primero y más importante es que si la plantación se realiza en macetas no hay que sembrar más de una planta por tiesto. Con esto evitaremos que compitan entre sí por los nutrientes y el espacio. Otra consideración que hay que tener en cuenta es: ¿qué esperamos cosechar? Un cultivador que quiere cultivar a partir de esquejes en un pequeño armario de interior y en el menor tiempo posible puede poner entre veinte y cincuenta esquejes por metro cuadrado, en macetas de dos o tres litros, dejarlos crecer durante una semana y forzar la floración. Con esta técnica obtendrá muchas plantas pequeñas rápidamente. En cambio, un cultivador de interior que plante semillas debe contar con que las plantas necesitan un mínimo de tres o cuatro semanas en crecimiento antes de empezar a florecer, por lo que se harán mucho más altas que los esquejes, especialmente si la variedad es de gran talla. Pineapple Chunk es una variedad principalmente índica que no se hace demasiado grande y necesita 55 días para florecer según el catálogo de Barney’s Farm. Black Jack es un híbrido índica/sativa que madura en 60-65 días y que por su genética (Jack Herer x Black Domina) es probable que crezca bastante más alta. En interior partiendo de semilla se suelen poner entre cinco y quince hembras por metro cuadrado, en macetas de cinco a veinte litros. En mi opinión y si es tu primer cultivo de interior, no pondría más de ocho y usaría macetas de diez o quince litros de capacidad. Cuanto más grande es la maceta, más fácil es el trabajo del cultivador. Las plantas en macetas pequeñas requieren riegos y abonados más frecuentes y dan plantas pequeñas.