No soy romántica
Yo veo que si no te enamoras, pues no te enamoras. No hay que darle vueltas a los porqués; así somos de diversos los humanos y las humanas: unos se enamoran locamente cada cinco minutos, y otros no se enamoran nunca. Unos pasan unos años muy enamorados y otros años sin enamorarse, y así es el amor: hay gente romántica y gente que no lo es. Yo he tenido novios que no eran románticos, pero he disfrutado mucho la relación, porque era otra forma de quererse menos convencional que el modelo de pareja tradicional que cae en la trampa del amor romántico. Que al final el romanticismo es solo eso, un espejismo colectivo, una ilusión de nuestra cultura para emparejarnos en dúos, y para que sigamos todos el mismo camino y nos adaptemos a las normas del romanticismo patriarcal. Si tú no caes en este espejismo, pues mejor, porque se sufre mucho. Es mejor amar con los pies en la Tierra, con el corazón, en el aquí y el ahora, desde el cariño y la comunicación. Cuéntale a tu novio tu forma de amar y de querer, háblale de cómo te sientes, y bueno, si él sigue pensando que no puede, entonces os separáis con amor, al fin y al cabo no es que no os queráis, sino que os queréis de maneras diferentes.