Si usas una pipa de agua de cristal siempre estás en riesgo de que se rompa. Tampoco hay que alarmarse, también le sucede a los coleccionistas de figuritas de porcelana.

Vayamos a lo básico. A esas cosas que harías si tienes el cociente intelectual por los suelos: nunca metas un bong en una mochila sin protegerlo contra golpes, aplastamiento u objetos de la mochila. Una vez superado este trago, vayamos a otras cosas.

Ten cuidado con la gente: Los novatos tienden a tirarlos, los veteranos a abusar y siempre que se fuma con cristal por en medio uno ve venir la tragedia. Asegúrate de que saben usarlo.

Cuando lo guardes pon las piezas por separado, es más seguro. Pero si lo quieres dejar montado utiliza gomas para sujetar las piezas y que estén juntas así evitas que al cogerlo se pueda caer al suelo (o algo similar a gomas, eso queda en vuestras manos).

Puedes atar las piezas con clips de plástico pero asegúrate de cogerlo siempre por la base o la puedes liar parda.

Respeta el bong.