Un club de cannabis de Valls (Tarragona) acaba de recuperar el derecho a reactivar su actividad después de dos años y medio cerrado por orden del Ayuntamiento. Un juez ha dictado que el cierre del club de cannabis, ordenado en diciembre de 2021, fue ilegal y que el Ayuntamiento no tenía pruebas suficientes para ordenar el cese de su actividad. El club presentará una reclamación de responsabilidad patrimonial al Ayuntamiento para pedir una compensación por los daños y perjuicios causados.

Según la información del Diari de Tarragona, la concejalía de Urbanismo, Patrimonio y Centro Histórico del Ayuntamiento inició un procedimiento administrativo para ordenar el cese de la actividad del club por ejercer una actividad de bar no autorizada. El procedimiento se sustentó en un acta levantada por los Mossos d’Esquadra, quienes tras una inspección señalaron que en el local se estaban consumiendo cervezas sin una licencia de actividad de bar. 

Después de iniciar el procedimiento, el club presentó un recurso en que sus responsables señalaron que el consumo de cervezas y otras bebidas realizado en el local se limitaba a las personas socias, quienes consumían las bebidas únicamente a precio de coste y sin intención de lucro. Pero el Ayuntamiento rechazó el recurso y ordenó el cese de la actividad. Entonces el club presentó un recurso contencioso-administrativo y ahora ha logrado que el juzgado falle a su favor.

La jueza encargada del caso ha afirmado en la sentencia que no duda de la veracidad de los hechos recogidos en el acta de los Mossos d’Esquadra, es decir, que el consumo de cerveza se estuviera produciendo. Pero afirma que ello no es indicativo de que en el club se estuviese llevando a cabo una actividad de bar. “Para tal deducción [es necesaria] la constatación de que la bebida se ofrece al público en general y no solo a los miembros de la asociación, así como que se pagaba”, dice la sentencia.