El Senado del estado de Alabama aprobó la semana pasada un proyecto de ley para obligar a las mujeres a presentar una prueba de que no están embarazadas como requisito para acceder al cannabis medicinal. La medida fue aprobada por un comité del Senado con 7 votos a favor y 2 en contra, y luego pasó a un debate en el pleno de la cámara. Todavía tiene que realizarse un tercer debate con votación en el Senado, y si sale aprobada será enviada a la Cámara de Representantes del estado.

El proyecto introduciría la restricción de acceso al programa de cannabis medicinal para todas las mujeres que estén “en edad fértil”. Según la información de Marijuana Moment, las mujeres de entre 25 y 50 años de edad que quieran comprar productos de medicinales derivados de la planta deberían aportar “un test de embarazo negativo de su médico o la documentación de un laboratorio médico certificado que haya sido encargado por un médico de Alabama”. La medida, tal y como está redactada actualmente, también prohibiría a los médicos del estado la prescripción de cannabis medicinal a mujeres entre los 13 y los 50 años “sin antes obtener un test de embarazo negativo de la paciente”.

El proyecto ha recibido críticas por parte de activistas y grupos por los derechos civiles y las políticas de drogas. “Todos los habitantes de Alabama deberían alarmarse de que el Senado esté considerando un proyecto de ley que violaría descaradamente los derechos constitucionales de las mujeres que necesitan marihuana medicinal”, dijo a Marijuana Moment Emma Roth, abogada del grupo Nacional de Defensores por las Mujeres Embarazadas. “Este proyecto no se basa en la ciencia y en realidad no mejorará los resultados de salud materna o infantil.  De hecho, impediría que las mujeres embarazadas que necesitan marihuana medicinal recetada la reciban, incluso cuando ella y su médico acuerden que es lo mejor para su salud y su embarazo”, dijo.