Cheetos con cannabis es justo lo que necesitan mis colegas, debió pensar la chica que fue detenida en Florida.

El asunto es grave porque nos encontramos ante un caso de detención de un menor. Todo parece indicar que no fue un error pero está en el límite de la broma y la juventud. La chica de 15 años compró una bolsa de “Weetos” que son básicamente iguales que los “Cheetos” pero con THC. Bastante THC. Junto a ella iban otros dos estudiantes que sabían lo que estaban comprando y que no se trataba de un snack para chiquillos.

La chica fue detenida y posteriormente puesta en libertad cuando sus padres fueron a recogerla. Se enfrenta a 10 días sin poder ir a clase y se estudia su expulsión.

Es un problema serio también el que enfrenta el negocio de los comestibles de cannabis porque por ley deben diferenciarse tanto en aspecto como en sabor de sus contrapartidas no infundidas. Es fundamental porque en las últimas semanas van varios casos (no solo en EE.UU.) de personas que han sido engañadas para que tomasen productos con cannabis o han dado comestibles con THC sin saberlo. En el caso de la niña de los Weetos ella sí sabía lo que estaba comprando pero al menos una de las chicas que los probó no tenía ni idea hasta que le llegó el subidón.

Lo bueno de todo esto es que las intoxicaciones con cannabis nunca son demasiado serias.