La edición mexicana de la revista Cáñamo ha sido declarada, dos años después de que comenzara a publicarse, como “publicación ilícita” por la Secretaría Técnica de la Comisión Calificadora de Publicaciones y Revistas Ilustradas (STCCPRI).

Esta comisión consideró en su día, en el 2015, a los dos meses de la publicación del primer número, que la revista fomentaba “actos contra la moral y las buenas costumbres”, y, afirmaron, que “hace apología al consumo de sustancias prohibidas” y “difunde directa o indirectamente el consumo del cannabis”. Dos años después, como decimos, la Secretaría de Gobierno, de la que depende la STCCPRI, ha dictado, de forma definitiva, que la publicación es ilícita.

El dictamen tiene dos consecuencias fundamentales: cancelación de la distribución y la posible imposición de sanciones administrativas para los responsables que pueden incluir arresto de 15 días, además del congelamiento de la denominación “Revista Cáñamo México”, con el fin de que nadie pueda hacer uso de ella.

El 5 de septiembre, el comité editorial de la revista, compuesto por Leopoldo Rivera, su editor; Julio Zenil, y por Carlos Martínez Rentería, ofreció una rueda de prensa para informar de que han solicitado un recurso de amparo que deja fuera de juego las disposiciones de la  STCCPRI hasta que se resuelva el juicio. “Durante el tiempo que dure el juicio, que puede ser de año y medio, la Segob no va a poder ejecutar sus conclusiones”, dijo Luisa Conesa, la abogada que está llevando el caso para Cáñamo México.