Black Hammer Brewing ha parado la producción de cerveza artesanal infundida con cannabis debido a una orden federal.

Esta compañía produce cerveza infundida con CBD, la más conocida es la Toke Back Mountain IPA. La federal Alcohol and Tobacco Tax and Trade Bureau han pedido el cese de la producción de cerveza debido a que según sus normas los productos que incluyan algún elemento en la cerveza que sean típicos de la cerveza deben estar aprobados previamente. Este es el caso del CBD.

El buró tiene una lista de los productos que se pueden mezclar para fabricar la cerveza. Si una cervecera quiere meter un producto que no esté en la lista debe pasar antes por su aprobación. Ni el CBD, ni los terpenos, ni el cáñamo están aún en esta lista.

La cerveza Toke Back Mountain IPA se produce desde hace un año. Ha tenido una acogida generosa entre los habitantes de San Francisco. Jim Furman, dueño de la empresa, comenta que las cervezas de CBD son las más vendidas.

Por fortuna para la empresa y dado que en ningún caso se trata de un producto peligroso van a poder vender el stock que les queda. Entre tanto consigan o no el permiso, va a ser un momento para el coleccionismo de una cerveza que puede que se vaya para no volver.