Si quieres hacer tu propia tintura de cannabis te explicamos una manera “sencilla”.
Puede que las tinturas no sean los mejores productos cannábicos del mercado pero sí que tienen una propiedad casi inigualable: se pueden almacenar por larguísimos períodos de tiempo. Solo tienes que guardarla en un sitio oscuro y fresco.
La tintura por lo general pega más fuerte y más rápido que un comestible, por lo que es una alternativa bastante razonable a estos últimos, según lo que uno esté buscando. Esta es una receta para hacerte la tuya.
Necesitas bastantes cosas, eso sí:
- 1 onza de cannabis de calidad
- Hash o kief si quieres añadirle potencia
- 2 copas de alcohol con alta graduación (que se pueda beber, claro)
- 1 grinder
- Papel de aluminio
- 1 bolsa de plástico con cierre
- 1 cuentagotas
- 1 jarra grande
- 1 bandeja de vidrio para el horno.
- 2 filtros para el café
- 2 medidores de cantidades
- 1 goma
- 1 par de guantes de látex
- 1 Embudo
Atención, ¡maneja tu paciencia para que salga la tintura!
Paso 1: Horno
Precalienta el horno a 112 grados. Mientras tienes que haber puesto el cannabis en la bolsa de plástico sellada dentro del congelador por una hora. El cannabis debe haber pasado por un grinder o estar desbrozada. Cuando saques el cannabis ponlo en la bandeja. Cúbrelo con papel de aluminio y déjalo una hora en el horno.
Paso 2: Sacar del horno y preparar
Una vez pase la hora y saca la bandeja y mete el cannabis en una jarra. Añade el alcohol. Debe haber lo suficiente para que se tape hasta arriba el cannabis. Ahora guarda el cannabis hasta ¡6 meses en la nevera! Asegúrate de moverlo de vez en cuando.
Paso 3: Procesar el cannabis
Después de que pase el tiempo necesario. Saca el cannabis de la nevera y utiliza el embudo para pasar el contenido de la jarra a otro recipiente. Limpia la jarra y colócale dos filtros de café atados con la goma. Una vez que estén los filtros bien atados derrama la tintura en la jarra.
Paso 4: Disfruta
Ya tienes tu tintura, así que disfrútala.
