Hace un mes, 65 trabajadores fueron despedidos de la compañía cannábica Pharmin. Esta firma constituida con capitales georgianos bajó sus persianas y todavía debe no solo los salarios de enero, sino también las indemnizaciones por despido y otras liquidaciones. Desde el inicio del conflicto gremial, los empresarios europeos están en el centro de la mira porque se fueron de un día para el otro, no sin antes vaciar las cuentas bancarias. Mientras el Gobierno nacional se comprometió a encontrarlos, ahora se conoció un nuevo hecho que los vuelve a poner en la mira. Días antes que los georgianos abandonaran el país, desaparecieron 167 kilos de flores secas con alto contenido de THC.
El robo de los 167 kilos de cannabis se dio a conocer días atrás, cuando el presidente del Instituto de Regulación y Control del Cannabis (IRCCA), Daniel Radío, lo contó en un informe realizado por TV Ciudad. Además, dijo que la falta de las flores se descubrió cuando las autoridades del ente regulador hicieron un inventario de las instalaciones abandonadas por los georgianos.
Ante el conocimiento del hecho, el IRCCA se comunicó con la gerencia de la empresa y a cargo del último empleado de Pharmin: Nicolás Bustillo, quien le habrá dado dos versiones diferentes sobre el robo de los 167 kilos de cannabis. Una es que decidieron no realizar la denuncia policial e iniciaron una investigación interna; la otra es que sí informaron a las fuerzas de seguridad y al Ministerio de Salud Pública. Pero el jefe de la Policía de Montevideo, Mario D´Elía, dijo que no tiene información del caso.
Los cultivos y operaciones de la compañía Pharmin estaban ubicados en una zona alejada de Zonamérica, un enorme parque industrial de 90 mil metros cuadrados y que es una zona de libre comercio internacional. Allí funcionan unas 350 empresas diferentes de todo el mundo que tienen beneficios fiscales. El predio de Pharmin era uno de los que tenía más medidas de seguridad al tratarse de una industria del cannabis. “Casualmente, las cámaras hace cuatro meses que no funcionan en esa zona”, dijo uno de los trabajadores despedidos, Ignacio Díaz.
Semanas atrás, el ministro de Trabajo y Seguridad Social, Pablo Mieres, se comprometió a encontrar a los dueños de Pharmin, después de una reunión que mantuvo con la Unión de Trabajadores Rurales y Agroindustriales (UTRAU). A más de un mes de haber iniciado el conflicto, los empleados despedidos aún siguen reclamando el pago de salarios e indemnizaciones. Ahora, el IRCCA se suma a encontrar a los georgianos porque una de las líneas de investigación que maneja el ente regulador es que hayan sido responsables de la desaparición de las flores para comercializarlas en el mercado ilícito.
