Un dato pasó desapercibido en el último estudio de consumo de sustancias psicoactivas en población escolar de Colombia del año 2016, y fue el repunte que tuvo el consumo de inhalantes legales conocidos como el “Dick” y el “Popper”, pues el primero aumentó al 2.2% y el segundo al 5.5%. Si para los padres, adultos o maestros hablar de solventes de este tipo es algo nuevo, para los escolares es una vieja práctica que se viene reportando desde el año 2010 aproximadamente. Tres factores generan preocupación sobre estos datos, el primero que estén vendiendo gato por liebre, es decir, que a los escolares les estén vendiendo como “Popper” (Nitritos) otras sustancias conocida como “Dick” (Cloruro de metileno) lo que aumenta la peligrosidad y el riesgo. 

El segundo aspecto es que son sustancias legales, de venta restringida pero legales, sobre las que técnicamente no operaría una medida como la incautación y destrucción de la dosis personal en quienes verdaderamente necesitan ser protegidos como son los niños, niñas y adolescentes en edad escolar. 

Por último preocupa mucho la alta penetración de estas sustancias en zonas rurales, como es el caso de Antioquia, donde la sustancia la han consumido niños, niñas y adolescentes rurales. El departamento de Antioquia conocido históricamente por sus altos índices de consumo de marihuana, reportó que el 14.1% de los escolares consumieron “Popper” el último año, siendo la sustancias más consumida para este departamento, mientras el cannabis llegó a un 12.2%. 

Esta realidad que presentan los estudios en consumos como el “Dick” y el Popper” avizoran un cambio significativo de las prácticas de consumo para Colombia en la próxima década.