El cannabis se puede curar y conservar al vacío protegido con un código de tres dígitos.

Uno de los argumentos utilizados en contra de la legalización de la marihuana es que regular el cultivo y venta de cannabis puede hacer que los niños y menores de edad accedan con más facilidad. Aunque es un argumento fácil de rebatir (a diferencia de la venta ilegal un mercado regulado tiene mecanismos legales para evitar el acceso a los más pequeños), es cierto que en EEUU han aumentado los ingresos hospitalarios de niños por ingesta accidental de marihuana, sobretodo comestibles.

Un nuevo invento que acaba de salir a la luz ha sido diseñado con el propósito de mantener alejado de los niños la marihuana y otros fármacos. Se llama SneakGuard, y no es otra cosa que un bote pensado para conservar en condiciones óptimas las flores del cannabis, los alimentos y cualquier otro tipo de medicina, y protegerlo con una código de desbloqueo.

El aparato es como una pequeña caja fuerte que necesita de un código de 3 dígitos para abrirse. El diseño cuenta con un botón para expulsar el aire del interior y conservar su contenido al vacío. Este detalle lo hace ideal para conservar durante largo tiempo el cannabis y, según The Cannabist, el bote tiene capacidad para almacenar casi medio kilo de cogollos.