Uno de los discursos más repetitivos entre los detractores de una regulación integral del cannabis es que el uso de la planta provoca la pérdida de memoria. Pero ahora, un nuevo estudio científico que revela que la situación es absolutamente contraria: las personas que consumen marihuana, ya sea con fines recreativos o medicinales, tienen menores probabilidades de padecer un deterioro cognitivo.
El deterioro cognitivo subjetivo se trata de una patología en la que las personas aparentemente sanas padecen un empeoramiento persistente y progresivo en su rendimiento cognitivo, pero sin manifestarse déficits en evaluaciones neuropsicológicas formales. La mencionada investigación, que fue realizada por la Universidad Médica del Estado de Nueva York, ha demostrado que el uso recreativo de cannabis está “significativamente” relacionado con un menor deterioro cognitivo subjetivo. “En comparación con los no consumidores, el uso de cannabis con fines no medicinales se asoció con una disminución del 96% de probabilidades de sufrir el deterioro cognitivo subjetivo”, sostuvo la investigación que se desarrolló con un entrecruzamiento de datos sanitarios y una encuesta a 4.744 adultos mayores.
Los autores del estudio no ignoraron investigaciones anteriores que relacionaban negativamente el consumo excesivo de cannabis con fallas en la memoria. Pero los científicos neoyorquinos señalaron que los resultados anteriores vinculan el uso frecuente de la marihuana con un rendimiento de memoria verbal comprometido, un empeoramiento de la función cognitiva y quejas subjetivas de memoria. “Sin embargo, las implicaciones cognitivas no están determinadas solo por la frecuencia del consumo”, dijeron y señalaron que hay otros factores cruciales como la formulación de los derivados de la planta, el método de administración y el motivo del uso también pueden “afectar los efectos cognitivos asociados con el cannabis”.
"Nuestros hallazgos subrayan la importancia de considerar múltiples factores, como los motivos del consumo de cannabis, al examinar la relación entre el cannabis y el deterioro cognitivo subjetivo. Se necesita más investigación para explorar los mecanismos subyacentes que contribuyen estas asociaciones”, sentenció el estudio.
