La Agencia Nacional de Vigilancia Sanitaria (ANVISA) de Brasil incorporó el Cannabis sativa dentro de la lista de medicamentos del país tras registrarlo en la séptima edición de la Farmacopea Brasileña. La medida fue aprobada mediante una Resolución de la Directiva Colegiada y establece determinados criterios para la seguridad, calidad, eficacia de los medicamentos que se elaboren a partir de los componentes activos de la planta.

Entre los puntos más destacados de esta inclusión a la farmacopea se encuentra la definición de estándares mínimos de calidad para las inflorescencias femeninas secas de Cannabis sativa, las cuales servirán como materia prima para la fabricación de medicamentos. Es importante señalar que estas inflorescencias no están destinadas para su consumo directo, sino que deben ser procesadas en formulaciones farmacéuticas que sean previamente autorizadas por ANVISA y asegurar la seguridad del consumidor y la eficacia de los productos finales.

La decisión de incluir el cannabis en la Farmacopea Brasileña surgió después de un proceso de participación ciudadana y científica, en la que se incluyó una consulta pública, entre febrero y abril del año pasado. Además, ANVISA había organizado en marzo un seminario web para esclarecer dudas y acentuar la importancia de la nueva monografía en el fortalecimiento de las políticas de salud pública.

"Los estándares definidos tienen como principal objetivo garantizar la seguridad de los pacientes y la eficacia de los medicamentos, fortaleciendo así la confianza en el sistema de salud público", aseguró ANVISA mediante un comunicado en el que se informó la incorporación del cannabis a la farmacopea brasileña.