Pese a que la mayor parte de las Marchas Mundiales de la marihuana se hace en países donde no es legal tomar cannabis (al menos por completo), por lo general los agentes de la ley hicieron la vista gorda en la mayor parte de estos sitios. Por desgracia encontramos ejemplos como el del chico argentino que agredieron unos policías, pero podría decirse (aunque de mala manera) que no estaba exactamente en la marcha. Pero, insistimos, es cogérsela con papel de fumar. En la marcha de Lima (Perú) la cosa se puso mucho más fea y la policía intervino demasiadas veces. 

Perú anda a las puertas de comenzar a hablar en el parlamento sobre la idoneidad de legalizar la marihuana medicinal, sin embargo parece que esa apertura de las instituciones legislativas no se trasforma en una mayor tolerancia policial en las calles. Según informan algunos medios, los policías peruanos intervinieron con gases lacrimógenos en las pacíficas manifestaciones de los ciudadanos de Lima. 

Jessica de la asociación Mamá Cultiva comentó a Marijuana que ese día “La policía trató de romper la marcha en tres ocasiones” incluso aunque los manifestantes se mostraron todo el rato respetuosos con los agentes. 

Cabe recordar que en esta manifestación iban personas en sillas de rueda y con niños pequeños. Las sobrereacciones de la policía cuando no se está dando una situación de peligro pone en verdadero peligro a estas personas. Se supone que están para proteger no para crear desprotección. 

Solo tres detenidos bajo los cargos de resistencia a la autoridad, lo que da a entender lo absurdo de la situación y lo poco peligrosos que eran los manifestantes.