Fumarte un porro en Singapur te puede costar la vida. Así educan a los niños en el país para que no se les pase por la cabeza flirtear con las drogas.

En Singapur la tenencia y el consumo de drogas se castiga con la pena de muerte por ahorcamiento. El país está en el top mundial de políticas de drogas duras. Su estrategia con las drogas está basada en la criminalización y en el castigo de los consumidores. La política es dar ejemplo de lo que te puede pasar si te acercas a las drogas y meter miedo a la población. Para los adultos el ejemplo son las ejecuciones, pero para los niños el país desarrolla estrategias de propaganda para asustarlos con un lenguaje más “apropiado”.

A continuación se muestran una serie de curiosas postales anti-droga elaboradas por la Alianza para un Singapur Libre de Drogas (Partnership for a Drug Free Singapore). Las postales fueron diseñadas en 2004 y ahora han vuelto a salir a la luz durante la Sesión Preparatoria para la UNGASS, la reunión especial de la ONU para abordar las políticas de drogas. Al parecer Singapur sigue estando orgulloso de ellas.