La marihuana medicinal ayuda a ancianos con las dolencias de la edad.

Los ancianos de Israel tienen el privilegio de poder fumarse una pipa de marihuana medicinal en los geriátricos. En Israel se permite el uso de marihuana medicinal para enfermedades como el Parkinson, la esclerosis múltiple, el cáncer o el trastorno de estrés postraumático. Y son varios los hogares de ancianos en los que se consume marihuana de forma terapéutica.

El programa de cannabis medicinal de Israel se implantó en 2007 y actualmente se calcula que hay en torno a unos 25.000 ciudadanos con permiso del gobierno para usar la marihuana con fines medicinales. Para los ancianos, que cada vez viven más, el cannabis “les ayuda a añadir calidad de vida a su longevidad” aseguraba una cuidadora al medio israelí.

En algunos centros de ancianos se han realizado estudios sobre la efectividad del cannabis medicinal. Según una noticia de Truth on Pot, en Hadarim, una residencia de ancianos israelí, 19 residentes de entre 69 y 101 años participaron en un estudio en el que tomaron cannabis tres veces al día.

Después de un año de tratamiento, los investigadores observaron reducciones en los espasmos musculares, rigidez, temblores, dolor y resurgimiento del PTSD, así como mejoras en el sueño y el peso. Los pacientes también fueron capaces de reducir su dependencia de las pastillas recetadas tomando cannabis en su lugar.