Canadá es uno de los principales mercados mundiales en la industria del cannabis. Si bien las ventas internas tuvieron una caída el año pasado, hay un sector que no para de crecer. Se trata del comercio de porro prearmados, que están muy cerca de convertirse en el producto favorito de los compradores locales. 

Según cifras oficiales, en 2024, las ventas de flores cayeron un 9,3% y los comestibles se desplomaron un 12,4%. Esto significó una disminución total de los ingresos impositivos por cannabis del 3,27%. De todos modos, el comercio de los porros prearmados tuvo un crecimiento del 1,24% y las unidades vendidas también aumentaron un 1%. Ante esta situación, el producto tan solo tiene un 0,25% de diferencia de ventas con las flores, el principal derivado que compran los usuarios canadienses y que representa un negocio de 11,4 millones de dólares (10,4 millones de euros). 

“Hay una fuerte inversión de los productores en Canadá en prearmados. De los nuevos productos lanzados el año pasado, el 40% fueron los prearmados, seguidos de flores”, dijo James Valentine, gerente de marketing de contenidos de Custom Cones, una compañía con sede en EEUU que se dedica a la producción de porros “pre-roll”. 

Esta tendencia de la preferencia de los prearmados parece que ha llegado para quedarse. A partir de los datos que maneja Custom Cones, durante los seis meses entre mayo y octubre pasados, los porros prearmados superaron en ventas a las flores en 33 millones de dólares (30,2), alcanzando un pico en julio con una ventaja de ventas del 3%.