En los últimos años se han producido varios estudios científicos que demuestran el potencial que tiene la psilocibina, presente en algunos hongos, para el tratamiento de enfermedades relacionadas a la salud mental. Ahora, la última novedad es que Hawái podría convertirse en el segundo Estado de EEUU, después de Oregón, que legalizaría la sustancia para fines medicinales.
La semana pasada, el senador demócrata Chris Lee presentó un proyecto de ley para regular el uso medicinal de la psilocibina. Según el texto de la iniciativa, “el propósito es garantizar que las personas que luchan contra traumas y dolencias de salud mental no sean penalizadas por el Estado por el uso de psilocibina”. En caso que se apruebe, la medida alcanzaría a los mayores de 21 años residentes de Hawái y que tengan estudios secundarios completos. Además, estarían obligados a participar de un programa de capacitación de integración psicodélica dictado por la Oficina de Bienestar y Resiliencia.
La regulación medicinal de los hongos psicodélicos solamente protegería a los pacientes que sufren determinadas condiciones de salud mental. Ellas serían: trastorno de estrés postraumático, depresión, ansiedad, estrés, anorexia, bulimia, adicciones a otras sustancias y el trastorno obsesivo compulsivo. Pero podrían agregarse otras enfermedades si el paciente hace una solicitud ante el Departamento de Salud con la recomendación de un profesional médico.
El proyecto de ley también establece que en el caso que sucedan intervenciones policiales contra usuarios de hongos psilocibes en donde se confisque la sustancia o parafernalia para consumirlos, las fuerzas de seguridad están obligadas a devolverlas. Sin embargo, si la persona miente sobre el uso medicinal y en verdad hace un consumo recreativo se le aplicará una multa de 500 dólares.
En la actualidad, el Estado de Oregón es el único de los EEUU en el que se permite el uso medicinal de la psilocibina, desde 2020. El año pasado, el Congreso de California había aprobado una ley que despenalizaba la posesión y uso no solo de los hongos psicodélicos, sino también de la mescalina y la dimetiltriptamina (DMT). Sin embargo, el Gobernador californiano, Gavin Newsom, vetó la iniciativa a mediados de octubre.
