Los estudios con sustancias psicodélicas como la MDMA o la psilocibina no paran de aumentar. Las investigaciones científicas sobre estas sustancias prohibidas internacionalmente hace medio siglo están en pleno auge y los campos de estudio se están expandiendo más allá de su potencial en el tratamiento de enfermedades para la salud mental. Esta semana un investigador de la Universidad Imperial College de Londres ha anunciado que ha conseguido la aprobación para investigar el impacto de la MDMA y la psilocibina en las relaciones sexoafectivas, con especial atención a la intimidad y la sexualidad.

Según ha publicado el investigador en su cuenta de X (antes Twitter) el estudio tendrá dos partes. La primera tendrá como objetivo comprender si la psilocibina combinada con apoyo psicológico puede aliviar la angustia en las relaciones en parejas insatisfechas. Para ello recopilarán los datos de 20 parejas que participan en un programa de terapia con psilocibina para parejas. En la otra parte, que se desarrollará por separado, evaluarán el impacto del consumo de MDMA u otros psicodélicos en una relación sexoafectiva de pareja, prestando atención a la satisfacción sexual y relacional, el apego y el amor. Para ello utilizarán un enfoque de investigación basado en grandes encuestas a parejas, a las que evaluarán tanto 4 semanas como 3 meses después de la experiencia con las sustancias.

“Inspirado por Love Drugs de Brian D. Earp, este proyecto busca arrojar luz sobre los efectos de mejora de las relaciones de los psicodélicos y la MDMA, que bajo ciertas condiciones, podrían actuar como ‘drogas del amor’”. Esperemos que haya datos preliminares sobre esto a mediados o finales de 2024”, escribió el principal investigador del estudio, Tommaso Barba.