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Así se enfrentó la transgresora fotógrafa Nan Golding a la farmacéutica causante de la crisis de opioides

Un documental recoge el activismo de la fotógrafa para señalar a la farmacéutica que produjo el OxyContin y promovió su prescripción masiva.

La fotógrafa Nan Goldin, un artista icónica especialmente conocida por sus fotografías de la escena contracultural de Nueva York de los años 70 y 80, es la protagonista del recientemente estrenado documental La belleza y el dolor, una crónica audiovisual sobre su lucha activista contra la familia Sackler, propietaria de la empresa farmacéutica que inició la epidemia de opioides en EE UU.

Los Sackler dirigieron la compañía Purdue Pharma, responsable de la producción del fármaco Oxycotin, un opioide sintético que fue prescrito de forma masiva en EE UU durante años en parte gracias a las agresivas y fraudulentas campañas de la empresa para promocionar su uso y venta. Los Sacker fueron además una reconocida familia de filántropos que donaron importantes sumas de dinero a museos de todo el mundo.

Nan Goldin sufrió una adicción a los opioides que se inició con el uso de Oxycotin, que le fue prescrito para tratar el dolor de una lesión en la muñeca. Como otros cientos de miles de estadounidenses, Golding aumentó la dosis de oxicodona de forma progresiva hasta acabar recurriendo a opioides del mercado ilegal, como la heroína, para hacer frente a su adicción. Tras saber de la existencia de la familia Sackler, su importancia en la crisis de opioides y su relación con los museos de arte contemporáneo en todo el mundo, la fotógrafa emprendió una cruzada personal y colectiva para evitar que la familia tuviera un reconocimiento en el mundo del arte.

“Comencé con el grupo llamado P.A.I.N. para abordar la crisis de los opiáceos. Somos un grupo de artistas, activistas y adictos que creen en la acción directa. Nos dirigimos a la familia Sackler, que fabricó e impulsó OxyContin, a través de los museos y universidades que llevan su nombre. Hablamos por los 250.000 cuerpos que ya no pueden.”, explicó la fotógrafa al medio Arts News en 2018, cuando organizó una venta benéfica de fotografías para dar apoyo a las víctimas de la crisis de opioides.

Goldin organizó protestas en importantes museos como el Museo Metropolitano de Arte y el Museo Guggenheim de Nueva York o el Louvre de París. También forzó la renuncia de la National Portrait Gallery de Londres a seguir aceptando fondos de la familia Sackler con la amenaza de retirar sus fotografías de una exposición prevista para 2019, una acción que también provocó que la Tate renunciara a la financiación de los Sackler.

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