La feria consolidó su perfil como espacio de intercambio entre comunidad, investigación y mercado. La organización convocó conferencias, talleres de cultivo y actividades de reducción de daños, además de un evento B2B que conectó a emprendimientos y proveedores regionales. Medios internacionales describieron a la Expo como una de las grandes citas del calendario cannábico, subrayando su crecimiento sostenido y su carácter abierto al público general.
El componente científico tuvo un rol destacado con el Concurso Nacional de Pósters Científicos y la presencia de equipos de investigación de instituciones públicas. La Escuela de Neurociencias y Sistemas Complejos (ENyS–CONICET) informó su participación, en línea con una agenda de investigación que en Argentina ha acompañado el desarrollo del uso terapéutico de derivados del cannabis. Las charlas y pósters abordaron aplicaciones clínicas, control de calidad, farmacognosia y desafíos regulatorios, con énfasis en evidencia y buenas prácticas.
En el plano industrial y comercial, el evento reunió a cientos de expositores del ecosistema cannábico: desde insumos para cultivo y genética hasta vaporizadores, cosmética y alimentos. La cobertura periodística local destacó el dinamismo del sector, pero también advirtió sobre tensiones del contexto: una “meseta” en el despegue industrial, así como la menor presencia estatal como promotor. Ese contraste entre potencia productiva y marcos regulatorios incompletos fue tema recurrente en pasillos y paneles.
Programáticamente, la Expo combinó contenidos para públicos diversos: talleres prácticos para personas usuarias y cultivadoras, conferencias médicas, espacios de industria y actividades culturales. La agenda incluyó la difusión de derechos de pacientes, instancias de asesoramiento y herramientas para el cumplimiento normativo, además de un foco en innovación (nuevas tecnologías de extracción, análisis y control) y en el cultivo responsable. El resultado fue una feria heterogénea que buscó acercar ciencia y comunidad en un mismo predio.
Expo Cannabis 2025 confirma que la escena cannábica argentina se sostiene en tres pilares: evidencia científica, tejido comunitario y una industria que pide reglas claras. Aun con vaivenes institucionales, el encuentro muestra que la política pública debe escuchar a pacientes, investigadores y productores para consolidar un modelo basado en derechos y salud. Como suele ocurrir en contextos de prohibición o incertidumbre, la sociedad civil y la ciencia marcan el rumbo.
🌱 Esto fue Expo 2025, la sexta edición de un sueño: tres días dedicados a encontrarnos y a celebrar la planta que amamos.
¡A seguir sembrando el mundo que deseamos! pic.twitter.com/fOKPP29MTC— Expo Cannabis Argentina (@expocannabisarg) October 20, 2025