Uno de los métodos de producción de extractos cannábicos más reciente es el Rosin Tech.

En los últimos años se ha popularizado el consumo de extractos de cannabis obtenido de la planta de marihuana, después que las semillas de marihuana se han convertido en planta, y son muy potentes elaborados por medio de disolventes como el butano o el hexano. El proceso de elaboración de estos extractos puede resultar extremadamente peligroso por las características de los disolventes, ya que son altamente inflamables, explosivos y tóxicos. El extracto más popular es el BHO, elaborado usando butano como disolvente. El procedimiento para fabricarlo es tan sencillo como peligroso, ya que tras hacer pasar el gas por un cilindro lleno de cannabis, se deposita en una bandeja de cristal, donde se deja evaporar. El gran problema es que cualquier chispa, llama o colilla puede hacer estallar el gas. La electricidad estática que se produce al caminar por un suelo enmoquetado o al rozar ciertas prendas de ropa es suficiente para provocar el desastre. No han sido pocos los accidentes que han ocurrido, y las consecuencias pueden ser terribles, resultando en enormes quemaduras o incluso provocando la muerte.

Pese a los riesgos, muchos cultivadores siguen produciendo BHO, pues se han aficionado al consumo de extractos de alta potencia que, hasta ahora, no eran fáciles de elaborar sin emplear los citados y peligrosos disolventes. Las cosas han cambiado con la llegada de la técnica Rosin. Ya no es necesario correr riesgos para producir un buen extracto cannábico. Ahora se pueden elaborar extractos potentes de fusión completa sin disolventes, sin procesos complejos, de modo completamente seguro y casero. Y lo mejor es que no hace falta una gran inversión: un rollo de papel de horno y una plancha para el pelo es todo lo que se necesita, además del cannabis, claro está.

Origen del término Rosin Tech

Me han preguntado de dónde viene el nombre Rosin Tech y la verdad es que al investigarlo me he sorprendido. Tech, como muchos sabéis, es una forma abreviada de decir técnica en inglés. Rosin significa ‘colofonia’, que es un tipo de resina sólida que se extrae de los pinos y otros árboles, sobre todo coníferas, y que tiene numerosas aplicaciones como ingrediente de tintas, colas, jabones, pegamentos, barnices, chicles, bebidas gaseosas y otros productos.

Si se denomina Rosin a este nuevo tipo de extracto cannábico es porque el proceso de elaboración guarda ciertas semejanzas con la fabricación de la colofonia, que se elabora calentando la resina fresca y líquida para que se evaporen los terpenos más volátiles, que una vez condensados dan lugar a la trementina. El residuo no volátil que queda de la resina es la colofonia. Pues bien, el proceso de calentamiento súbito de los cogollos que se emplea con el Rosin Tech produce un efecto similar en la resina cannábica, se evaporan los terpenos más volátiles y quedan los menos volátiles junto con los cannabinoides. En definitiva, que la traducción al castellano de Rosin Tech es ‘técnica de la colofonia’, aunque así no suena tan bien como en inglés.

Ventajas de los extractos Rosin

• Muy seguros, en su elaboración no se necesitan disolventes inflamables o explosivos, por lo que no hay peligro de sufrir un accidente ni de que queden residuos tóxicos en el extracto.
• Elaboración rápida, el extracto está listo para consumir en cuestión de unos minutos, frente a los varios días que se requieren para elaborar y purgar correctamente un extracto BHO.
• Los elementos necesarios para su elaboración son fáciles de conseguir y nada sospechosos; a nadie le llama la atención una plancha del pelo. En cambio, los aparatos necesarios para elaborar el BHO se parecen mucho más a un laboratorio con sus matraces, placas calentadoras o bombas de vacío.