¿Las mejores variedades de cannabis cultivadas en California? Aquí están.
La tierra del vino, del sol y del cannabis: ¡California! Leafly ha hecho un ranking de las mejores variedades del estado paradigmático de la costa oeste. Atentos a qué podéis cazar por aquí de todas estas maravillas. Porque lo que crece en California es la forma de las cosas que vinieron, que vienen, que vendrán.
Blue Dream: Rara es la lista en la que no entre esta variedad. Sabor a baya y efecto vigorizante. Como un batido de estos que venden los gamers en sus canales, pero en bueno.
Gelato: De crianza propia de California desde Cookie Farm. Ayuda a relajarse y echarse un sueño. Una buena dormida sin sombras ni malos presagios. Como debe ser.
Purple Punch: Mezcla de Larry OG y Granddaddy Purple. Se la asocia con efectos relajantes que van mejor por la tarde-noche.
Weeding Cake: También conocida como Pink Cookies. Variedad para la euforia. Euforia, y no como cuando uno ve que lo mejor que puede hacer es echar el dinero en una hipoteca a plazo fijo. Eso no es euforia, eso es enterrarse en vida. Mientras tanto, un canuto de Weeding Cake, por favor.
Original Glue: Otra variante de las muchas “pegamento” que hay por tierras del oeste. Esta está especialmente dirigida a que te quedes pegado al sofá. Prepara una serie, película o maratón de documentales sobre Noruega, porque te lo vas a tragar de inicio hasta el final.
Jack Herer: ¿Hace falta decir algo de esta hiperfamosa variedad? Además de que siempre está entre las destacadas en casi cualquier lista de las mejores, Jack Herer es una variedad para animar el espíritu. Así que anímalo.
GSC: Entra esta variedad con fuerza entre las más vendidas en los mercados de California. ¡Vamos, que me la quitan de las manos! Efectos relajantes para dejarse llevar por melodías suaves de crooners locos.
Sour Diesel: Otra incombustible. Hay gente que la odia por su olor a gasolina. Ahora bien: es la preferida de las bandas de moteros postapocalipticos. No la dejéis pasar si lo que os gusta es la gasolina. Dale ya más gasolina.
Granddaddy Purple: La legendaria variedad cruce de Purple Unkle y Big Bud. Sabor afrutado y golpe a la cabeza para dejarte knock out lo antes posible.
Sherbert: Es hija de la GSC y Pink Panties. Californiana born and raised, esta variedad está pensada para encontrar el punto chill necesario para acabar la jornada. Una vista desde el Golden Gate para los enamorados de los atardeceres, la melancolía y el olor a leña quemada en las grandes ciudades.