Un pequeño estudio recién publicado ha encontrado buenos resultados en el tratamiento con extractos de cannabis de espectro completo de la epilepsia refractaria en niños y adolescentes. Los investigadores observaron que los pacientes en tratamiento con extractos completos (con todos los cannabinoides de la planta) presentaban una reducción del 80% en la frecuencia de las convulsiones. Las epilepsias refractarias son un grupo de epilepsias resistentes a los fármacos y las opciones terapéuticas disponibles.
Se trata de un estudio de tipo retrospectivo observacional, esto es, los investigadores estudiaron cómo había funcionado el cannabis en los participantes después de que estos iniciaran el tratamiento. Los participantes fueron diez pacientes de 18 años o menos con una variedad de epilepsias infantiles intratables.
“Los cuidadores informaron mejoras sostenidas y significativas en las facultades conductuales, psicológicas y cognitivas asociadas con el consumo de cannabis medicinal. La reducción de la frecuencia de las convulsiones mensuales en nuestro grupo demuestra la viabilidad de este medicamento en estos pacientes", dice el estudio.
Hasta la fecha, los estudios de mayor calidad, con protocolo aleatorizado, controlado y de doble ciego, solo se han realizado con extractos de CBD aislado para tres formas raras de epilepsia. Estos han concluido que la administración de CBD podría reducir las convulsiones en un porcentaje de entre el 23% y el 48%. Los resultados del presente estudio indican que los extractos de plantas enteras resultan superiores al tratamiento con CBD aislado, puesto que se dio una reducción media del 80% en la frecuencia de las convulsiones en una variedad de epilepsias infantiles en las que el tratamiento estándar había fallado.
Los autores señalan que el estudio tiene varias limitaciones: “la recopilación de datos fue retrospectiva y se basó en el recuerdo de los padres (aunque estos a menudo llevaban un diario de convulsiones); no hubo asignación al azar ni placebo, por lo que no hubo un grupo de comparación o placebo”, advierten. También señalan un posible sesgo en el sentido de que los padres que decidieron participar pudieran ser aquellos con niños que habían tenido una mayor mejoría con el cannabis medicinal; que no se evaluó el efecto de eliminar el tratamiento para validar la necesidad permanente de tratamiento; y que el número de pacientes fue pequeño.
Hace un año el mismo equipo de científicos publicó otro estudio en el que se administró cannabis medicinal rico en THC y CBD a diez pacientes que padecían epilepsias refractarias desde su nacimiento. La administración de cannabis redujo el número de convulsiones en todos los participantes en un 97%. Cuatro de los pacientes contaban con recetas de Epidiolex (CBD), pero no habían experimentado una mejora en sus síntomas hasta que se les administró una combinación de CBD y THC durante el estudio.