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Murfin o el color como lugar al que volver

El artista andaluz nos desvela los secretos de su éxito, cómo ha sido el camino para alcanzarlo y todo aquello que le queda por lograr a través de un trabajo lleno de color y buenas vibras. 

Manuel Delgado (Linares, 1993), internacionalmente conocido como Murfin, es un artista que ha logrado posicionarse entre los muralistas más valorados. Por destacar algunos de sus trabajos, ha pintado en festivales de muralismo como Le MUR de Reims, en Francia; el Festival Bolskan, en Huesca, y el Festival Asalto de Zaragoza, entre muchos otros. También ha participado en ferias tan importantes como la Feria de Arte de Hong Kong y la Affordable Art Fair de Singapur. Además, sus murales se encuentran en multitud de ciudades tanto nacionales como internacionales. 

Todas las elecciones de los artistas –la técnica, los temas, el cromatismo utilizado…– tienen un sentido concreto, y, si no indagas en él, nunca podrás entender del todo su obra. La seña de identidad de Murfin es el color, y en esta entrevista nos desvela la razón. También hablaremos sobre todo lo relacionado con su obra, referentes y futuros proyectos.

Aunque trabajas en otros muchos formatos, ¿por qué te has decantado por el muralismo como principal vía de expresión? 

Es el primer formato con el que realmente comencé a trabajar. Con nueve años empecé a pintar grafiti y siempre ha sido con lo que más a gusto me he sentido; digamos que es mi esencia y todo lo que hago hoy día es gracias a eso, pero actualmente creo que está muy nivelado con el trabajo de estudio, mitad y mitad.

Murfin o el color como lugar al que volver

La noche y el día, lienzo para su última expo en Madrid, en Galería Modus Operandi. A la derecga, Jumping to Paradise, obra para la campaña de la marca VUSE.

Murfin o el color como lugar al que volver

Murfin enredado en el proceso de alumbramiento de una obra.

¿Qué emociones dirías que transmite la gama de colores que usas? 

Intento transmitir siempre una parte positiva para el espectador. El color ha sido algo muy importante en mi vida, y desde pequeño he necesitado en algunas cosas tener esa alegría y ese color. Siempre me puso triste o me sentía extraño cuando estaba en sitios muy oscuros o tenebrosos, en los que no me encontraba nunca bien. Entonces, poco a poco, y al crecer y reflexionar, fui eligiendo los colores y la luz. Que hoy tenga una paleta tan animada no es casualidad, nace de todo esto.

Has pintado por muchos lugares del mundo, como Atenas, Singapur, Nueva York, entre muchos otros, pero ¿en cuál has sentido que valoran más tu trabajo? 

Diría que en Asia. Desde que comencé a trabajar allí, ha tenido muy buena acogida y creo que la cultura de allí y el esfuerzo que he puesto ha sido muy valorado. También pienso que apoyan a la gente que se esfuerza e intenta conseguir vivir de su pasión y lo consigue. Creo que he notado también mucho ese respeto, y me alegro muchísimo de este detalle y me hace sentir muy a gusto siempre que trabajo allí. 

Murfin o el color como lugar al que volver

Of the Wall, exposición individual en Singapur.

Cuando has colaborado con marcas, ¿te han dado total libertad de creación? 

La verdad es que estoy muy contento con las últimas colaboraciones que he tenido. Es algo que también busco, que las colaboraciones te valoren y sean igual de positivas por ambas partes. Y para eso se necesita esa libertad y entender el objetivo de las dos partes. Te puedo nombrar dos colaboraciones de este año que han sido muy positivas y enriquecedoras, con la marca VUSE y ART Company. Como verás, en estas colaboraciones la libertad, el valor, el trato con ellos y el respeto han sido increíbles, y eso se nota mucho en todos los sentidos. Creo que hay que trabajar con marcas que sumen a tu carrera y no hacer colaboraciones sin sentido o solo por dinero. Afortunadamente, estoy teniendo este último año un trato genial y una relación magnífica que va más allá de una simple colaboración, y eso ayuda mucho en tu carrera.

“Soy de una forma de pensar bastante libertaria, así que muchas drogas pienso que quizá sería mejor que fuesen legales, pero no soy ningún experto en estos temas. No me veo como el más indicado para hablar de una cuestión así, pero eso es lo que opino”

¿Sigues alguna rutina para trabajar? 

Más que rutina diría que al final trabajo casi las veinticuatro horas porque es muy difícil desconectar totalmente. Es una pasión y estás siempre pensando, ya sea desde la creación, el negocio, la investigación…, pero siempre estoy muy conectado con ello. Y puedo decir que el trabajo del día a día varía mucho dependiendo de qué proyecto tengas en ese momento, fechas de entregas, viajes, etc. En mi caso, suelo pintar en el estudio entre ocho y diez horas cuando estoy proyectos en los que debo entregar varias piezas. Entonces un día en mi vida, cuando estoy más a full, me levanto y me voy a una cafetería de confianza a desayunar y a tomar café. Y allí hago un trabajo más de diseño, creación de bocetos e ideas, y también contesto correos… Allí puedo estar dos horas. Me siento desde siempre creativo y activo en esos espacios que reúnen cosas que me encantan: buen café, buena comida, sitio bonito y agradable y buena música. Después hago algo de ejercicio (calistenia) y, luego, al estudio a pintar. Pintando por el día suelo escuchar más música y después, cuando cae la tarde, suelo escuchar muchos podcasts: deportes, emprendimiento, arte y actualidad. Y, al llegar a casa, cuando tengo tiempo y no estoy muy cansado, me gusta ver alguna serie o peli o también jugar a videojuegos; esto es de lo que más me hace desconectar, junto al deporte. 

Murfin o el color como lugar al que volver

Hong Kong y Happy Rabbit, acrílico sobre lienzo.

¿Cuáles son tus referentes artísticos? 

Afortunadamente, muchos, y hoy día es genial poder seguir a muchos de ellos en redes sociales y ver su trabajo y proceso. Eso es una suerte brutal. Por decir algunos nombres: clásicos como Rubens, Goya, Rembrandt, Picasso, Monet, Magritte, Matisse, Cuno Amiet, y actuales como Felipe Pantone, Aryz, James Jean, Hopare, Ivan Alifan, Andy Dixon, Low Bros, Ariel Cabrera Montejo, Sean Norvet, Revok, Satone, Scheroff, Daniel Arsham. Seguro que se me escapan muchos, pero he pensado una lista rápida de gente cuya obra me encanta, y también su forma de presentarla.

¿En qué calle y en qué museo te gustaría que estuviese una de tus obras? 

No sé decirte un museo; es algo tan grande para mí que ojalá algún día llegue, pero cualquier gran museo del mundo sería un sueño. En cuanto a muralismo, podría nombrarte algunos lugares donde sería increíble poder tener un mural en una gran ubicación: Tokio, Roma, París, Irlanda del Norte, Namibia, Nueva York, Madagascar, Río de Janeiro… 

Murfin o el color como lugar al que volver

Proyecto Wonder Space, en Las Navas de Tolosa, la Carolina (Jaen). A la derecha, Bioluminiscencia, en Fuengirola, Málaga.

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Contemplación, obra para el festival 23700 Linares y Crear de la nada, en la Fundición de la Cruz, Linares (Jaen).

Aunque en el ámbito artístico son muy comunes, sabemos que no eres consumidor de drogas, pero ¿qué opinión te merece que estén prohibidas?

Soy de una forma de pensar bastante libertaria, así que muchas drogas pienso que quizá sería mejor que fuesen legales, pero no soy ningún experto en estos temas. No me veo como el más indicado para hablar de una cuestión así, pero eso es lo que opino.

¿Qué consejo le darías a alguien que quiere empezar en el grafiti desde cero? 

Que empiece por pasión y no por nada más… Si le pones pasión y ganas, esfuerzo y gran disciplina, creo que lo demás llegará, pero no hay que empezar la casa por el tejado. Y dentro de ello creo que lo más importante es la disciplina; es algo que siempre aplico y es lo que más me ha servido para llegar humildemente a donde estoy ahora, no hay otro mejor consejo que dar a alguien para empezar.

¿A qué nuevos retos te enfrentas este año? 

Este año, uno de mis grandes objetivos es intentar hacer algunas exposiciones individuales más. Por ahora ya ha comenzado el año con una, y también me gustaría poder producir más obras y llevarlas a otros países, junto a murales, para poder conseguir que mi obra llegue a más sitios. 

Murfin o el color como lugar al que volver

Manuel Delgado, alias Murfin, empezó a pintar grafiti con nueve años.

Murfin o el color como lugar al que volver

Desafío con la empresa AV-DROP en Urban Art Barcelona.

Murfin o el color como lugar al que volver

Bus pintado para el festival Color Urban ART en Estrasburgo.

Este contenido se publicó originalmente en la Revista Cáñamo #315

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