Suele ocurrir a menudo que las noticias sobre resultados investigaciones científicas que están en sus primeras fases se malinterpretan hasta el punto que llega a parecer que se ha encontrado alguna cura definitiva para una enfermedad de difícil tratamiento. En el mundo de las noticias cannábicas es algo que sucede con cierta frecuencia. Un ejemplo muy claro es cuando un estudió observó que el THC podía reducir la proliferación de células cancerígenas. Esto sucedió, pero únicamente en células in vitro y ratones de laboratorio, y no en pruebas con humanos, por lo que no se puede decir que el cannabis cura el cáncer.
Eso mismo ha sucedido estos días con la publicación de un estudio en el que un equipo de científicos observó que los cannabinoides CBGA y CBDA pueden ser útiles para prevenir la infección por el virus SARS-CoV-2, responsable de la enfermedad del covid-19. En pocos días la noticia ha dado la vuelta al mundo y se ha replicado en numerosas ocasiones, muchas veces perdiendo la perspectiva sobre el tipo de estudio y lo limitado de sus resultados.
El estudio ha observado el efecto de los cannabinoides en células de laboratorio, y no hay ninguna garantía de que vaya a funcionar en un organismo humano. Además, los cannabinoides utilizados son el CBGA y el CBDA, dos cannabinoides en su forma ácida que no pueden consumirse de forma fumada (porque el calor los transforma en CBD y CBG), de modo que si alguien había pensado que fumarse un canuto le iba a salvar de una infección por covid, está equivocado.
Ante la expansión de la noticia algunos expertos han llamado a la calma y han recordado que se trata de un estudio preclínico con resultados muy novedosos y no verificados, por lo que la confianza en su posibles beneficios es todavía muy débil. “Es un estudio que ha sido muy promocionado a nivel mundial, es un estudio que es válido, pero no avala el uso de los cannabinoides para prevenir o tratar la infección por SARS CoV-2”, explicó al medio Subrayado la doctora Leticia Cuñetti, de la Sociedad Uruguaya de Endocannabinología. Como en cualquier estudio científico que obtenga unos primeros resultados, las moléculas deben seguir evaluándose en posteriores estudios para verificar que el efecto obtenido en el primer estudio es constante y luego realizar estudio más amplios que permitan afianzar los resultados.