Los que han leído el libro o visto la serie de Fariña ya conocen la historia del narcotráfico en Galicia durante la década de los 80 y 90. Quien fuera buque insignia de las Madres contra la Droga, Carmen Avendaño, explicaba en una reciente entrevista que la connivencia entre alcaldes y narcos era vox populi, y que los del Partido Popular eran los más corruptos. También que, a pesar de que años atrás estaba en contra de la legalización del cannabis, ahora ya no lo ve tan claro y cree en su regulación para proteger a los jóvenes. Una muestra más de cómo los postulados prohibicionistas no se sostienen con el paso del tiempo, si se tiene una mínima mirada critica.
En Alicante y Cataluña hemos tenido dos muestras de sensatez judicial. En la tierra de los turrones un juez ha advertido de la “absoluta falta de garantías procesales” que supone la externalización de la prueba respecto a la cadena de custodia del “drogotest”. Por ello, el conductor que había sido multado son 1000 euros y la retirada de 6 puntos del carnet queda libre de sanciones, y otros conductores ya conocen una vía para recurrir a partir del hecho de que la cadena de custodia se rompe en el momento que la muestra sale del ámbito público. En Girona un juez ha machacado a los policías que entraron en una masía y procedieron a su registro con la excusa de que una persona afroamericana (trabajador de la finca) estaba esperando en la puerta de entrada. Además, imputaron a dos personas por un cultivo de marihuana que no se ha podido probar que fuera destinada al tráfico. El sesgo racial de los maderos y su pésimo olfato para cazar narcos los ha llevado a quedar retratados: ¡racistas prohibicionistas! El juez dejó escrito que la actuación policial había “sacado los colores al tribunal”.
Por último, todo nuestro afecto, cariño y mejores deseos para una de las personas más influyentes y admiradas en el debate sobre la marihuana en el estado español. Fernanda de la Figuera, genio y figura, inspiradora de la lucha feminista y por la normalización y regulación de la marihuana, madre de los clubes de cannabis y difusora de las propiedades y usos medicinales a lo largo de más de 30 años, está siendo injustamente juzgada por plantar cannabis en su huerto. La primera vista del juicio prevista para finales de abril, donde se dieron cita decenas de activista para apoyarla, fue aplazada. Siguiente round en octubre. Hagamos que Fernanda sienta nuestro apoyo desde todos los rincones de la península, pues sin ella no habríamos llegado tan lejos como movimiento cannábico. ¡Gracias, por tanto, Fernanda!