Un grupo de activistas se reunió la semana pasada a las puertas de la Suprema Corte de Justicia (SCJ) para protestar por el procesamiento y encarcelamiento de personas usuarias y cultivadoras de cannabis. Los organizadores, que convocan una concentración y una fumada colectiva, denuncian que policía y jueces están aplicando una política represiva contra quienes usan la planta, pese a que la posesión, el consumo, la tenencia y el cultivo se legalizaron en el país hace ya nueve años.
“Tras haberse regulado en 2013 en nuestro país la producción y expendio de marihuana en flor, nos enfrentamos hoy por hoy a una política de seguridad pública y drogas con un pronunciado sesgo belicista y prohibicionista”, dice el comunicado publicado por los activistas. Según estos, la persecución se apoya en la Ley de Urgente Consideración (LUC), en el Nuevo Código del Proceso Penal y las instrucciones de fiscalía en referencia al combate al microtráfico.
Los activistas señalan la figura de la “tenencia no para consumo” como una de las más absurdas y fuente de numerosos procesamientos judiciales a un amplio universo de cultivadores y usuarios. Asimismo, denuncian que estas normativas se están aplicando de forma forzada y como resultado las personas usuarias “ven suspendidas sus garantías legales, causando así un daño irreparable no sólo al normal desarrollo de sus vidas, sino también a sus familias y a la sociedad toda”.
“Esta visión prohibicionista y punitiva en conjunción con el juicio abreviado presente en el Nuevo Código del Proceso Penal permite que se realicen prácticas ‘extorsivas’”, afirman los activistas, apuntando a casos en los que se amenaza al acusado con encausar también a su pareja si este no acepta la acusación, lo que lleva a que “muchas personas que no han incurrido en falta alguna terminen aceptando una causa y un procesamiento claramente no sujetos a derecho”, afirman según cita La Diaria.