En muchos aspectos el degustador del café es muy parecido al catador de cannabis: quiere una calidad exquisita en ambos productos pues son esos pequeños lujos que nos hacen la vida más llevadera. Elegir el mejor grano de café y los mejores terpenos tienen mucho en común.
Aquí os dejamos unas sugerencias sobre qué variedad puede pegarle bien a una variedad de café.
Chemdog y Costarricense
La Chemdog ofrece un aroma afilado y gaseoso, y le pega bien el café pues este último tiene un toque ligeramente ácido que ayuda a disfrutar esta maría. El café de procedencia costarricense suele ser el más adecuado no solo por lo que mencionamos de la acidez, sino porque suele tener un toque a chocolate que complementa el perfil de la Chemdog.
MAC (Miracle Alien Cookies) y Keniata
La MAC es una variedad que entra por los ojos y por la boca. No solo es bonita sino que cuando la pruebas te llevas un buen golpe de fragancias afrutadas. Dado que su olor es penetrante, lo ideal es un café que pueda estar a la par.
Los cafés de Kenia tienen la reputación de ser muy potentes y directos con los cítricos. Estos cafés son bombas de frutas grandes y brillantes, y aunque tal vez no sean la taza ideal para la mañana, son una buena elección para tomar junto a una variedad atrevida como MAC.
Zkittlez y Colombiano
La Zkittlez es una de las variedades que tienen el raro terpeno del linalol. Además, ofrece un aroma floral con toques de lavanda. Después de probar esta variedad, comprenderás la relación entre el cannabis y el lúpulo.
A esta variedad le pega un café de tipo colombiano. Los cafés colombianos, según la región y la altitud cultivada, pueden desarrollar una gran acidez, lo que le pega de forma maravillosa a la Zkittlez. Este café tiene unas encantadoras notas de vainilla y fruta de hueso además de aromáticos florales, perfectos para el brillo lupulado de Zkittlez. Ojo, no os llenéis de entusiasmo con este texto porque, dicho así, parece más sabrosa la prosa que la variedad.
Forbidden Fruit y etiopiano
La Forbidden tiene unas propiedades afrutadas y con toques a cereza. Cuando se dice que si abres un tarro de con Forbbiden Fruit su olor llega hasta el quinto piso se exagera un poco, pero no está del todo lejos de la realidad. Necesita un café de igual calidad y que sea tan sabroso como esta planta: el café de Etiopía es el ideal: chispeante, efervescente y con notas cítricas y de frutos rojos.
Big Smooth y café natural prensado
Big Smooth es de las pocas variedades que tiene pineno como terpeno dominante. Ese frescor debería juntarse con algo que se sienta igual de fresco. Lo mejor en este caso es prensar tu propio café. Los cafés procesados naturalmente son el resultado de procesar toda la planta de café en lugar de solo los granos, lo que da como resultado un café con notas de frutas, específicamente bayas.
Grampa’s Breath y guatemalteco
Variedades con un olor un tanto especial. Es una índica menos conocida que otras y que desciende de OG Kush y Granddaddy Purple. Es una variedad para relajarse por lo que lo ideal es ponerse una taza de descafeinado. Sin embargo, sea decaf o no, el café de Guatemala es limpio y tranquilo. Esta taza está llena de ligeras notas de chocolate e incluso algo de manzana.