El Gobierno italiano ha prohibido el uso y cultivo de la ayahuasca, la bebida tradicional de origen amazónico y con propiedades psicoactivas que se utiliza con fines terapéuticos, religiosos y espirituales. El Ministerio de Salud ha emitido un decreto por el cual se incluye a la ayahuasca en la Lista 1 de sustancias sometidas a control, la más restrictiva de todas. Además de la ayahuasca, se han incluido sus principales ingredientes (las especies vegetales Banisteriopsis caapi y Psychotria viridis), y sus componentes psicoactivos (DMT, harmalina y harmina).
Con la publicación del decreto, la ayahuasca y sus componentes han pasado a quedar clasificados como sustancias peligrosas sin ningún valor medicinal, en la misma lista en la que aparecen sustancias como la heroína o la cocaína, a pesar de que existen varios estudios sobre su potencial terapéutico e informes que prueban que no tiene efectos negativos sobre la salud de las personas. Según el diario L’Indipendente, el decreto fundamenta la decisión a partir de la “consideración de información extraída de la literatura internacional”, recordando dos casos de intoxicación por harmina ocurridos en 2011 y 2018 y cinco intervenciones policiales antiguas.
El decreto ha privado a las personas que usan la ayahuasca de tener un acceso a la sustancia. En el país existe desde hace varios años la ICEFLU, la iglesia ayahuasquera italiana del Santo Daime, cuyos miembros se han visto obligados a suspender el uso y la importación de ayahuasca hasta que puedan aclarar la situación con las autoridades, o hasta que consigan ser reconocidos formalmente como iglesia.
El representante legal de la iglesia ICEFLU, Walter Menozzi, habló con la asociación española Plantaforma sobre los posibles motivos del decreto. “Creo que tiene que ver con los secuestros [incautaciones] de ayahuasca en Italia. Hay muchos grupos que están importando y dando ayahuasca de una manera no segura, al contrario que el Santo Daime y otros grupos serios, y esto ha puesto en alerta al Gobierno. No sé decirte por qué ha sido en este preciso instante, pero la vía legal escogida es la única que le queda al gobierno italiano, después de que el Tribunal Supremo nos diera la razón en 2006 y refrendara que la ayahuasca no estaba prohibida”, explicó en una entrevista publicada en el blog de la asociación.
Con este decreto Italia se suma a Francia, país que prohibió la ayahuasca en 2005. En otros países como España la situación legal de la ayahuasca es ambigua porque no está prohibida pero tampoco regulada, y la mayoría los jueces acaban por absolver a los acusados o archivar los casos de personas denunciadas por el uso de la bebida.