Si tienes una flor de cannabis y descubres semillas, ¿qué podemos hacer con ellas? Aquí os damos algunos consejos.
En lugar de tirar las semillas a la basura, vamos a ver si podemos sacarlas algo de partido.
Si tu planta tiene semillas es probable que sea porque fue polinizada en algún momento antes de comprarla o durante el cultivo. Se suele decir que si tu cannabis tiene semillas es de menor calidad si se compara con el cannabis “deshuesado”. El cannabis con semillas acaba siendo utilizado para los comestibles.
Lo que los expertos recomiendan en estos casos es que, primero, encuentres las semillas inmaduras para no acabar fumándotelas y, segundo, separa las que son aún cultivables por si acaso. Las inmaduras suelen tener un color blancuzco y ser más pequeñas que las maduras, que son oscuras y más grandes.
Vale, una vez que tenemos las semillas buenas, ¿qué hacemos?
Puedes sembrar una planta. Sí, a lo mejor nunca te dio por el cultivo y esta podrías ser una buena oportunidad de probar tus cualidades como cannacultor. Si eres un experto también puedes tratar de cultivar la planta solo por placer, como esos cannacultores que hacen bonsáis con el cannabis.
También puedes irte al monte y tirar las semillas en un lugar donde, tal vez, puedan germinar por su cuenta. ¿Quién sabe? A lo mejor en unos meses crece una bonita planta salvaje.
Te las puedes comer. Técnicamente las semillas son comestibles y el cannabis es rico en grasas Omega 6 y Omega 3 y rico en vitaminas A, E, D, y B. Sin embargo, nosotros no recomendamos que tomaseis ese camino habiendo comestibles de cannabis mucho más sabrosos.
También puedes venderlas, pero ten cuidado con las leyes de donde vivas: puede ser considerado delito.
Por último también puedes fliparte y comenzar un banco de semillas. Las que sacaste de ese cannabis de menor calidad te pueden valer para experimentar nuevas sensaciones.