¿Sabes lo que es un makanaky?
Si te ofrecen un makanaky, ¿sabes qué te están dando? Podrás imaginar que es un porro pero, ¿de dónde viene esta expresión?
Si te ofrecen un makanaky, ¿sabes qué te están dando? Podrás imaginar que es un porro pero, ¿de dónde viene esta expresión?
Porro, canuto, lejía… y makanaky, así son los nombres mil del instrumento favorito del fumeta. En Málaga al cigarrito de marihuana también se le llama makanaky. De esto tiene la culpa Cyrille Makanaky (52 años) exfutbolista que pasó por el Málaga CDF con más pena que gloria futbolística pero que disfrutó (y mucho) de la fiesta en la comunidad andaluza.
El fichaje de Makanaky llegó tras el mundial de Italia de 1990 donde Camerún realizó el que es su mejor resultado hasta el momento en esta competición. Cayó en cuartos de final contra Inglaterra en un partido épico (3-2) en el que perdieron por un penalti durante el tiempo de descuento. Venía de haber ganado a Argentina en grupos (0-1) donde quedó la primera y a Colombia en octavos (2-1) que también estaba en racha.
Después de los mundiales los clubes se vuelven locos y fichan a todo lo que huela a estrella y Makanaky acabó con sus huesos en Málaga en una temporada horrible que llevó al club hasta Segunda división B. No es que Makanaky tuviese la culpa pero su trabajo fue bastante cuestionado, tanto que se le metió en el saco de “los peores fichajes de la historia del fútbol español”.
Makanaky era un tipo al que le gustaba la juerga y estar en la calle más que darle patadas a un balón, cosa perfectamente comprensible. Se hizo amigo de los camellos que vendían cerca de la Rosaleda (el estadio del Málaga; tampoco se fue muy lejos). Esta relación de amistad y compra de material era conocida por casi todo el mundo de la ciudad.
Era habitual, cuentan por ahí, encontrarse a Makanaky fumando marihuana en los locales de la ciudad. Dado que Makanaky es un tipo muy simpático y cercano, la gente comenzó a llamar al porro "makanaky" en su honor. Había comenzado una leyenda.
La cosa con Makanaky no acaba aquí y, como adelantamos, este tipo se forjó esa leyenda a fuego: En 1993, abandonó el Málaga para fichar por el Villarreal, con resultado bastante triste; colgó las botas en 1998 y su último equipo fue el Barcelona de Guayaquil de Ecuador. Se fue del club enfadado por el trato y aseguró que le dejaron a deber mucho dinero. Esto le llevó hasta un chamán que maldijo al club: no ganó ningún título hasta 2012. Cuidado con Makanaky.
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