El bodegón policial como una de las bellas artes
Las imágenes sobre incautaciones policiales son de una finura en términos estéticos que merecen ser considerados una de las bellas artes.
El bodegón policial debería ser considerado una de las bellas artes. La exposición de elementos incautados en las operaciones policiales y que tan orgullosamente muestran las fuerzas (y cuerpos, ¡cuerpazos!) de seguridad del Estado no tienen que envidiar nada de a los de Cézanne, Velazquez o Caravaggio.
¿Habrá un libro de estilo para el bodegón? ¿Seguirán a una escuela específica? ¿Surgirá de vez en cuando algún policía que rompa con las normas del decoro artístico e inicie un movimiento manierista? ¿Para cuándo el surrealismo o el expresionismo abstracto?
Sea como fuere, se nota que en Cáñamo somos aficionados a los bodegones de la policía y seguimos con disfrute (delectación pseudo-erótica, dirían algunos) el Tumblr de la policía. No es de extrañar, por tanto, que celebremos como si fuese la final de la Copa de Europa las recopilaciones de los mejores del año.
En esta ocasión os dejamos canela fina, autentico trabajo policial que hace palidecer a Sherlock Holmes. Viendo esto bodegones uno puede pensar que cada intervención policial es como la de un cirujano experto: un tajo firme y preciso que acaba con el tumor. Diréis: “¿pero son pocas cantidades? ¿no son un poco ridículos?” Y os responderemos: “La ley mordaza no nos deja expresar nuestra opinión”.
Naturaleza muerta para toda la familia.