El Gobierno de las Bahamas anunció hace unos días que presentará un proyecto de ley para despenalizar el consumo de cannabis y regular su uso para fines médicos, religiosos y de investigación. El plan gubernamental incluye la regulación de la producción de cannabis en el país y la eliminación de las condenas anteriores por posesión de la planta, así como la regulación del acceso a tratamientos del cannabis para los pacientes.
El proyecto fue anunciado el pasado jueves por el fiscal general y el ministro de Salud durante la rueda de prensa semanal de la Oficina del Primer Ministro. Estos explicaron que el objetivo es llevar la propuesta al parlamento el próximo octubre. “El objetivo sería debatirlos antes de finales de este año, porque hay mucho trabajo por hacer”, dijo el Fiscal General, Ryan Plider. “Hay que crear capacitaciones, certificaciones, una plataforma digital para rastreo, prescripciones… y todo eso tiene que hacerse antes de que se expidan las licencias”, explicó.
Según los detalles publicados por Marijuana Moment, el Gobierno pretende, por un lado, dejar de perseguir penalmente a las personas consumidoras, despenalizando la posesión de pequeñas cantidades y eliminando las condenas y registros judiciales anteriores. Por otro lado, regular su producción y uso para fines distintos al lúdico, sentando las bases para la creación de una industria nacional. Y, además de esto, crear formas de acceso reguladas para pacientes y personas pertenecientes a la religión rastafari.