El pasado 1 de abril, Alemania se convirtió en un nuevo país que reguló todos los usos del cannabis. Entre los puntos de su normativa se incluye la creación de asociaciones civiles que pueden sumar socios que compren flores y esquejes, ya que el autocultivo también está permitido. Ahora, la última novedad es que a dos meses de la legalización se han disparado las ventas de semillas y clones.
Según una encuesta realizada por la consultora YouGov, el 7% de los participantes respondieron haber comprado clones o semillas de cannabis desde que inició la legalización. Esta tendencia está formada en mayor medida por adultos jóvenes, ya que el 14% de los que respondieron afirmativamente tenían entre 18 y 34 años. En el caso de los alemanes mayores a los 65 años, tan solo el 2% aseguró haber adquirido los insumos para el autocultivo.
De todas formas, la gran parte de los encuestados dijo que no planea adquirir semillas o clones, con un total del 78% de las respuestas. Sin embargo, la encuesta aporta datos relevantes para empezar a entender el fenómeno del autocultivo en Alemania. En el estudio participaron unas 3.375 personas. Esto quiere decir que, si el 7% de los participantes tiene los elementos imprescindibles para comenzar la producción doméstica de cannabis, existen por lo menos unas 236 personas que ya lo están haciendo. Además, el 11% de los encuestados dijo que planea hacerlo. Entonces, se sumarían 371 nuevos cultivadores que, por primera vez, adquirirían semillas y esquejes de forma legal en Alemania.