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Especialista dice que es imposible que 500 kilos de cannabis fuesen devorados por ratones

Unos policías argentinos acusados de hacer desaparecer 500 kg de marihuana echaron la culpa a los ratones. Un experto viene a confirmar lo obvio: es imposible.

Unos policías argentinos acusados de hacer desaparecer 500 kg de marihuana echaron la culpa a los ratones. Un experto viene a confirmar lo obvio: es imposible.

Unos policías argentinos acusados de hacer desaparecer 500 kg de marihuana echaron la culpa a los ratones. Un experto viene a confirmar lo obvio: es imposible.

Adrián González Charvay es el juez encargado de investigar la desaparición de 496 kilos de marihuana de unas dependencias policiales durante abril del año pasado. Las pesquisas señalan directamente a un antiguo comisario de policía y unos cuantos agentes que declararon desconocer qué había sucedido con esa cantidad de marihuana. La excusa que todos pusieron fue que “se la habían comido los ratones”.

Como las cosas hay que hacerlas bien el juez llamó a un experto en zoología del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet) y que también se desempeña en la Universidad de La Plata. La conclusión del informe fue que no era “probable” que esto hubiese sucedido. Vamos, que ni de coña se comen 500 kilos los ratones de un día para otro:

"Si se considera que un ratón come aproximadamente 15 gramos diarios de alimento, para deglutir los 800 kilos hubieran hecho falta miles de animalitos durante meses, sin contar que a la primera ingesta de esta sustancia procesada hubieran muerto".

Como ya os contamos, en abril del año pasado Emilio Portero relevó como comisario a Javier Specia en la Delegación del Departamento de Pilar. Al producirse el cambio Portero detectó que las cantidades incautadas de marihuana no se corresponden con las que estaban anotadas en el registro del anterior comisario. Se inició una investigación de asuntos internos en la que se comprobó que, en efecto, faltaban unos 540 kilos de cannabis (finalmente han sido 496 kilos).

Se llamó a declarar tanto a los encargados del caso como al comisario que precedió a Javier Specia, Julio César Torres. Los 4 encausados repitieron la misma historia: “se lo habrán comido los ratones”. Los peritos, no fuera a ser que la historia fuese verídica, procedieron a investigar la coartada pero por condiciones ambientales la posibilidad era nula. Por no haber no había ni bichos muertos por la sala.

Los policías investigados están ahora imputados y se sabe que Javier Specia no presentó su declaración de bienes durante 2017. Pinta mal para la policía o muy bien para los ratones ladrones.

Fuente: La Nación

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