Según un estudio del Instituto de Medicina Forense de la Universidad de Berna (Suiza), los porros pierden hasta un 300% de THC si se compara con los concentrados cannábicos.
No solo el THC sino cualquiera de los cannabinoides que uno puede encontrar en la marihuana. El dab siempre va a lograr que te llegue más componentes del cannabis a los pulmones que los canutos, o al menos eso asegura el informe.
Para llegar a esta conclusión los investigadores utilizaron una dispositivo que “simula” cómo reciben nuestros pulmones el humo del porro o del dab. Pero cuidado: este experimento no trata de ver cuál de los dos coloca más o si existe una equivalencia entre canutos y porros. Lo que se quiere probar es cuánto se pierde quemando la planta o mediante pirolisis.
Si se sigue esta línea de investigación la vaporización a baja temperatura del dab conserva mejor los cannabinoides que quemar la planta, algo que, por otra parte se intuía que podría ser así.
Por ejemplo y para entender de qué va esto. Cuando uno fuma un canuto va inhalando sucesivas caladas que, por mucho que pierda, van acumulándose en los pulmones (y de ahí al torrente sanguíneo y etc.) mientras que el dab, por mucho que conserve, suele acabarse con una sola calada. Se estima que un porro puede tardar hasta dos minutos en quemar la flor (en condiciones de investigación) mientras que el dab se consume en 5 segundos.
En otras palabras, el informe no dice algo tan exagerado como que hacerse un dab es como fumarse cinco porros. No, para nada. Solo que el dab conserva mejor el trasvase de cannabinoides del producto a los pulmones.
Por tanto, ante la pregunta “¿qué coloca más?” Esta investigación no da una respuesta. Lo que si se confirma es que la combustión es, posiblemente, el peor sistema que hay para no perder cannabinoides si se compara con otros.