Parachute es un pequeño pueblo de Colorado que acaba de permitir que se abra otro nuevo dispensario. Todo indica que Parachute está especializando su economía en la venta de cannabis.

Según el recuento actual existen tantos dispensarios en Parachute que tocarían a 1 por cada 170 habitantes. La población del pueblo es de 1200. Parece bastante evidente que el fin último de todo esto es convertirlo en un lugar de peregrinaje cannabico.

Parachute está situado a la salida de una de las interestatales más relevantes del estado de Colorado, lo que la convertía en un lugar perfecto para establecerse como lugar de paso del turismo cannabico. Y parece que se confirma cuando en Parachute hay más dispensarios que farmacias por habitante.

Este pueblo es un ejemplo de cómo el sector industrial y de recursos acabó reconvirtiéndose en otra cosa. Parachute se fundó por sus depósitos de gas natural. Cuando tocó techo y se cerraron los depósitos la pérdida en ingresos por impuestos fue de un 35%. Dinero que no se ha vuelto a recuperar hasta que la marihuana se hizo legal en el estado.

El alcalde del lugar, Stuart McArthur, asegura que “en realidad la marihuana recreacional está cubriendo lo que perdimos cuando se cerraron los pozos de gas natural”.

¿Tendrá un tope legal el numero de dispensarios que se podrán abrir en Parachute? Parce que no. El alcalde dice “no hemos puesto un tope porque creemos en el mercado capitalista…” Así que la respuesta es “no”. Dice que noes problema del comité de gobierno decidir si un negocio va a triunfar o no, así que si no hay demanda y abren otra tienda el problema es de la tienda y no del ayuntamiento.