De entre los Beatles, Paul McCartney es al que más hondo le caló la weed. Pero este noviazgo de décadas le trajo algunos problemas con la justicia.
McCartney era un gran aficionado a la yerba. Pese a que los cuatro Beatles le dieron a la mandanga, así como a otros psicodélicos, la yerba se convirtió en la compañera de viaje de McCartney hasta los 69 años. Fue a esa edad cuando McCartney renunció a la mandanga porque quería ser un buen ejemplo para sus nietos. Ya, sí: es cierto que fumar maría no es “un mal ejemplo” pero hay que entender que nuestro mundo aún no ha cambiado demasiado y ver a un abuelo dándole a la yerba se sigue percibiendo como algo “poco aconsejable”.
En cualquier caso, desde que Bob Dylan les presentó a doña María, McCartney se encandiló con ella tanto que casi le cuesta su segundo matrimonio con Heather Mills. Esta le dio un ultimátum para que dejase la yerba o acabaría con la relación. Su esposa actual, Linda, que era tan aficionada como él, consumió casi toda su vida hasta que tuvo que dejarlo por un cáncer en el que necesitó un trasplante de médula. Sea como sea, la mandanga a acompañado al conocido músico desde hace mucho tiempo.
Estás han sido las 5 veces en las que McCartney ha sido detenido por la marihuana.
10 de agosto de 1972
Tanto McCartney como Linda Eastman fueron detenidos en Suecia, país conocido por su poca tolerancia con la marihuana. Pese a que llevaban poca cantidad de marihuana encima. Les detuvieron a la vuelta de un concierto de Wings en Gotemburgo. La fianza les constó unos 1.300 dólares de la época. McCartney dijo que la autoridad había sido “demasiado sería” con el caso.
8 de marzo de 1973
Esta vez le tocó por cultivar una sinsemilla en su granja de Escocia. Según su defensa, McCartney argumentó que no sabía que se trataba de una semilla de cannabis porque se la había mandado un fan y desconocía que se tratase de marihuana. Sí, claro… El caso es que McCartney se las apañó para pagar solo 240 dólares de multa. Es lo que tiene ser hiper-famoso.
2 de marzo de 1975
Mientras conducía por California, McCartney y Linda Eastman fueron detenidos por un oficial de policía que percibió el olor a mandanga que salía del auto. Como Linda no conducía decidió cargarse con la responsabilidad y dijo que la yerba era suya. Paul consiguió que no le detuviesen y los cargos contra Linda se retiraron en un corto periodo de tiempo.
16 de enero de 1980
Japón adora a los Beatles pero tampoco deja pasar una relacionada con la marihuana. Esta ocasión sí que fue una buena pues pillaron a McCartney en el aeropuerto tratando de meter en el país 218 gramos de yerba “dinamita”. Estuvo encerrado por nueve días en una celda de 12 por 24 metros en Tokio. Aunque le podían haber caído nueve años de cárcel logró que se le deportara (e iban ya dos veces) sin que se le sometiera a juicio. Se le soltó con la condición de que firmase una declaración de que nunca volvería consumir cannabis. La firmó pero, por supuesto, mintió.
17 de enero de 1984
Casi cuatro años después la pareja vuelve a ser arrestada, esta vez en Barbados después de haber comprado maría a un camello en la playa. Salió de la cárcel con una fianza de 200 dólares pero casi entra en prisión por una larga temporada. Linda salió con una fianza de 105 dólares.
Que los dioses conserven a McCartney por mucho tiempo.