La policía detuvo a una mujer de 47 años que conducía por las calles de Gales colocada. Llevaba encima yerba, speed y armas.
La mujer, que iba bastante ciega, conducía una moto para personas con movilidad reducida por las calles de Cardiff a las 2 de la mañana. Cuando la paró la policía, los agentes detectaron un fuerte olor a marihuana y que la mujer parecía ir colocada. La mujer aseguró que no llevaba nada ilegal pero en el registro encontraron speed y maría y una pistola aturdidora. Como era de esperar, la mujer fue llevada a comisaría y se abrió una investigación. Entre las pertenencias encontraron también una navaja con cuchilla oculta, dos móviles y tarjetas SIM extra para los teléfonos.
Yvonne Harvey, que así se llama esta mujer, dijo llevar la pistola aturdidora porque su casa fue recientemente asaltada. Casa que comparte con su pareja Ellis Sherwood, cuya historia es más interesante aún que la de Harvey. Sherwood había estado en la cárcel anteriormente a los 19 años por asesinar a un vendedor de periódicos; sin embargo, fue puesto en libertad 11 años después por la Corte debido a que se consideró que la condena fue un error.
Dos años después de salir de la cárcel, Sherwood sufrió un infarto debido al consumo de drogas excesivo, hábito que adquirió en prisión. En compensación por la condena, Sherwood recibió 200.000 dólares, pero su abogado defensor asegura que ese dinero atrajo a los ladrones, de ahí la idea de tener armas para defenderse de un posible asalto.
En la casa que comparten, la policía encontró más bolsas de marihuana y en los teléfonos había mensajes de compra venta de marihuana y otras drogas. Se arrestó tanto a Harvey como a Sherwood. Los abogados de Sherwood han tratado de alejar a su cliente con este asunto, lo que llevó a la policía a no presentar cargos. Mientras tanto, Harvey se ha hecho cargo de todas las acusaciones de venta y posesión drogas, así como la de armas. Se la sentenció a 6 meses de cárcel y se ordene que entre en un programa de rehabilitación durante 15 días.