Paige Spiranac se ha convertido en un fenómeno de Internet y del deporte que practicó durante un tiempo de manera profesional, el golf.
Durante esta cuarentena, Spiranac ha contado por redes sociales cómo el CBD le ha ayudado a mejorar sus relaciones personales. La ex golfista es seguida por más de 2.5 millones de personas. Nos atreveríamos a decir que casi todos hombres, porque, como es bien sabido, el golf es uno de los deportes con mayor seguimiento tiene por parte entre este sector de la población. Existen un par de razones que abalarían este comentario, pero lo dejamos para otro momento.
“El CBD es un milagro. Ha ayudado a mi relación, mi sueño y mi estado de ánimo. Ha ayudado a mi calidad de vida…No sé qué haría sin Medterra en mi vida”, comentó en las redes.
Estas personas no dan puntada sin hilo. A ver si os váis a creer que una persona que siguen 2.5 millones y que seguro que visitan habitualmente para ver cómo maneja sus palos de golf, va a declarar que le gusta el CBD sin que haya una marca detrás que pague ese comentario.
Tiene un podcast que se llama “vive o muere”, por si alguien quiere seguirla.
Spiranac también habló sobre su rutina diaria durante la cuarentena: “Comienzo a comer a las 11 a.m. y termino a las 7 p.m…Lo hice durante tres semanas y media y vi cambios realmente buenos. Duermo mejor y mi cuerpo se siente mejor. Es divertido mezclarlo”.
No vamos a ocultar que Spiranac aprovecha mucho su impresionante físico para vender sus productos. Tampoco lo oculta ella y en más de una ocasión ha demostrado cómo puede meter una pelota de minigolf en el hoyo usando de punto de apoyo sus pechos. “Putt de pechos”, para ser preciso.