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Presentan más de 1.500 amparos judiciales en Argentina por las demoras en el registro de usuarios medicinales de cannabis

Desde la asunción de Javier Milei como presidente hasta la actualidad, el Ministerio de Salud acumula alrededor de 130 mil trámites sin resolución. 

Desde 2021, en Argentina existe el Registro del Programa de Cannabis (REPROCANN), que funciona bajo la órbita del Ministerio de Salud nacional. Se trata de un sistema que permite el autocultivo de cannabis y la tenencia de hasta 40 gramos de flores para uso terapéutico, establecido después de la promulgación de la ley de cannabis medicinal del año 2017. Sin embargo, desde la asunción del gobierno de Javier Milei, la cartera sanitaria no aprueba las solicitudes ni renovaciones del permiso. Se calcula que en la actualidad hay más alrededor de 130 mil personas que esperan su licencia medicinal. Por eso, en las últimas semanas se han presentado más de 1.500 amparos judiciales para proteger a los pacientes frente a las demoras de la administración pública.

“Los amparos se presentaron en diferentes juzgados federales de todo el país. En la mayoría de los casos fueron acogidos y también se consiguieron medidas cautelares que ordenan al Ministerio de Salud dar de alta el REPROCANN”, dijo el abogado Juan Palomino, integrante del estudio jurídico Estudio 420 y la persona encargada de haber realizado los casi 1.500 amparos. Si bien la mayoría de los recursos fueron aceptados, algunos jueces declararon que no tienen competencia de actuación.

“Decidimos hacer esta acción de amparo porque la situación es insostenible. Hay alrededor de 130 mil personas que se encuentran esperando, las cuales por no tener su REPROCANN aprobado quedan expuestas a la violencia institucional”, dijo Palomino sobre aquellos que corren un riesgo al cultivar cannabis porque continúa siendo una sustancia ilegal, a pesar de que exista una ley que protege el uso medicinal. El mecanismo de excepción a la normativa punitivista es el mencionado REPROCANN. Pero si las autoridades sanitarias no resuelven las solicitudes, los pacientes quedan desprotegidos. “Hay casos de todo tipo, pero todas son personas con diferentes patologías”, agregó el abogado.

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