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Descubriendo tesoros por el sur

Sardinas “marianadas” con pipirrana cañamoruna y Borosur Haze

Mens sana in corpore sano. Vamos a nutrir y refrescar el body con un plato bajo en calorías y lleno de vitaminas, minerales y omega-3. Y con este maravilloso descubrimiento sativo y sus efectos estimularemos la mente y la dejaremos volar, como decía Medina Azahara: “Liiibre como el vieeentoooooo”. 

Mens sana in corpore sano. Vamos a nutrir y refrescar el body con un plato bajo en calorías y lleno de vitaminas, minerales y omega-3. Y con este maravilloso descubrimiento sativo y sus efectos estimularemos la mente y la dejaremos volar, como decía Medina Azahara: “Liiibre como el vieeentoooooo”. 

Elaboración

Para esta receta he elegido la variedad Borosur Haze, de Green Road. Este banco que nace entre Sevilla y la costa tropical granadina ha sido todo un descubrimiento. Miman sus variedades con cultivos ecológicos y veganos dotándolas de una calidad máxima y aportándoles sabores y matices difíciles de igualar. Borosur Haze es una sativa que tiene estructura y tiempos de floración de índica pero sin perder los efectos y propiedades que la caracterizan. Estimula la creatividad, la sociabilidad, el apetito e incluso la sexualidad. Su sabor es cítrico y afrutado, con toques terrosos en algunos ejemplares. 

Con esta delicia sureña he preparado un cannavinagre de Jerez fantástico. Para medio litro de vinagre he utilizado 12 g de cogollos. Como ya he explicado en otras recetas, lo primero será congelarlos tres o cuatro días antes para así facilitar la extracción del THC. Después habrá que triturarlos bien e incorporarlos al vinagre para que maceren en la nevera durante otros tres o cuatro días. Finalmente lo escurrimos bien con un colador de tela y lo reservamos. 

Sardinas con pipirrana

A continuación podemos escamar y filetear las sardinas con mucho cariño y delicadeza, ya que su carne es muy tierna y fácil de estropear. Primero las decapitamos y después deslizamos el cuchillo trasversalmente entre la espina y la carne pegándonos a la espina en dirección a la cola. Habrá que quitarles la ventresca y las espinas que puedan quedar. Si lo veis muy complicado podéis decirle a vuestro pescadero que lo haga por vosotros. Como vamos a comerlas crudas deberemos congelarlas al menos 48 h para evitar el dichoso Anisakis. 

Completado el proceso, ya podemos “marianarlas”. Templaremos un poco el agua para poder diluir fácilmente la sal en ella, y una vez que esté bien fría sumergiremos los filetes limpios. Los dejaremos dentro de 5 a 10 min para blanquearlos y salarlos un poco. Mezclamos en un bol el cannavinagre con el zumo y la ralladura de los cítricos y el azúcar y sumergimos los filetes de sardina durante 40 min aproximadamente. Mientras tanto, podemos ir preparando la pipirrana. Lavamos bien las verduras y las cortamos en brunoise, es decir, lo más pequeñitas que podamos y procurando que todos los trozos sean iguales. Una vez cortadas las aliñamos con el AOVE, el aceite de cáñamo, el zumo de limón, la sal y el comino. Antes de servir le picamos un buen puñado de hierbabuena y se lo mezclamos. 

Para montar el plato ponemos la pipirrana de cama, tumbamos los filetes de sardinas encima y sin hacer mucho ruido terminamos arropándolas con un poco más de hierbabuena picada por encima. Espero que os gusten y os refresquen el cuerpo y la mente. 

Sardinas con pipirrana

INGREDIENTES PARA CUATRO PERSONAS

Sardinas “marianadas” 
8 sardinas medianas 
150 ml de cannavinagre de Jerez de Borosur Haze 
2 naranjas grandes 
2 limones grandes 
2 cs de sal marina 
1 cs de azúcar 
½ l de agua 

Pipirrana cañamoruna
1 tomate hermoso y carnoso 
1 pepino mediano 
1 cebolla morada pequeña 
½ pimiento rojo de asar 
½ pimiento verde de asar 
3 cs de AOVE del bueno 
2 cs de aceite de cáñamo 
Sal marina al gusto 
Un manojo de hierba buena fresca 
1 cs de comino molido 
4 cs de zumo de limón 
 

LA DOSIS CORRECTA

Se estima que medio gramo por persona si no es usuaria de cannabis es una dosis suficiente para sentir los efectos. Si eres consumidor habitual la tolerancia hacia la sustancia activa hará que necesites el doble: un gramo. No olvides que durante la digestión el THC se convierte en una molécula más potente que propicia una experiencia retrasada y hasta tres veces más intensa que con una cantidad similar fumada. El efecto tarda entre 30 y 90 minutos en mostrarse en todo su esplendor, y puede llegar a mantenerse hasta 8 horas.

Dado que no todas las hierbas son iguales y que todos somos diferentes, estos consejos sobre cantidades y efectos son orientativos. Es al comensal al que corresponde encontrar su medida. La prudencia siempre es buena consejera.

Fotos

COIMAGEN

Este contenido se publicó originalmente en la Revista Cáñamo #247

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