El santo en el reino de la retranca
El martes 19 de enero se celebró en Santiago San Kanuto, la festividad de los fumetas. Amantes del cannabis y de la propia libertad se reunieron y desfilaron en alegre marcha por la ciudad del apóstol. Mientras disfrutamos de la fiesta, hablamos con la gente de la Escuela Prucupá y con Álvaro Lois, presidente de la Xuntanza Antiprohibicionista (XA).
El martes 19 de enero se celebró en Santiago San Kanuto, la festividad de los fumetas. Amantes del cannabis y de la propia libertad se reunieron y desfilaron en alegre marcha por la ciudad del apóstol. Mientras disfrutamos de la fiesta, hablamos con la gente de la Escuela Prucupá y con Álvaro Lois, presidente de la Xuntanza Antiprohibicionista (XA).
Existe un halo de libertad que rodea al San Kanuto compostelano, y no solo es el humo que desprende. La fiesta organizada los últimos doce años por la Xuntanza Antiprohibicionista se ha convertido en un lugar de encuentro al que querer volver. La plaza de la Quintana o la Carballeira de Santa Susana fueron los escenarios de las primeras celebraciones, hasta que por problemas con el ayuntamiento se acabó en la CSA do Sar y la CSA de Eskarnio y Maldedir, dos okupas que resisten en Santiago regidas por la libertad y el respeto.
Los asistentes este año han podido participar en un taller de extracción de resina, degustar una chocolatada, competir en un concurso de porroflexia, así como bailar en los conciertos y en el pasacalles amenizado por la batucada Escuela Prucupá de Trópico de Grelos. Esta asociación cultural, de vital importancia para el mundo de la percusión compostelana, acompaña a esta celebración desde sus inicios. El punto de partida de la batucada fueron las reivindicaciones en la calle, y de ahí que irremediablemente se juntasen sus destinos. La dirección de Trópico de Grelos nos cuenta los porqués de esta unión tan fructífera:
“El carácter festivo y de celebración de San Kanuto casa a la perfección con la filosofía del bloco de percusión surgido de la escuela. Esta actividad, libre de clichés y de las restricciones artísticas que normalmente rigen en otras situaciones, sirve para reivindicar una sociedad más justa, alegre y exenta de esas convenciones sociales rancias, donde se legisla en contra de la libertad y la voluntad popular con ideas peregrinas y contradictorias. Somos una tribu global preocupada por vivir en sintonía con nuestro entorno y nuestros semejantes a través de lo que nos une, dejando a un lado diferencias ficticias impuestas por un mundo cada vez más encorsetado. La implicación en estos eventos por parte de la gente de nuestra escuela es total, sin tener relación directa con los hábitos y los gustos personales de sus integrantes. Se trata de una simbiosis perfecta que nos permite dar a conocer nuestra forma de ver el mundo a través de nuestra música, integradora y humanizadora; despertar conciencias al son de la piel y la madera, y apoyar humildemente un movimiento social que solo pretende conseguir un espacio mejor para las personas: una vuelta a los orígenes de nuestras sociedades, donde el intercambio de ideas y la comunicación eran realidades cotidianas y no utopías por las que luchar”.
Como los años anteriores, todo fluye en esta fiesta con la naturalidad y la normalidad que pretenden los asistentes para el resto de los días. Nunca ha existido ningún tipo de altercado violento en esta celebración, por eso dicen algunos que San Kanuto es el único santo que de verdad predica la paz.
El presidente se confiesa
La Xuntanza Antiprohicionista lleva más de una década luchando en Santiago por las libertades de los interesados en las drogas, informando sobre los riesgos del consumo y asesorando sobre la legislación vigente que les afecta. Entrevistamos a Álvaro Lois, farmacéutico, empresario y presidente de la XA:
Otro año más de San Kanuto en Compostela, ¿cuántos van ya?
Organizando la XA sería nuestro XII San Kanuto, desde el 2005. Pero en Compostela existe una gran tradición de esta celebración. Ya en 1993 la gente de la Casa Encantada y de PACO (Personas Antiprohibicionistas de Compostela) organizaron el mítico San Kanuto de la compostelana plaza de A Quintana, y desde aquellos años se celebra ininterrumpidamente organizado por distintos colectivos.
¿Por qué San Kanuto y no San Canuto?
¡Por derechos de autor! ¡Con la iglesia hemos topado! En el primer San Kanuto que organizamos un representante local del catolicismo, creo recordar que un seminarista, después de amenazas contra nuestras personas, vía mail, por semejante blasfemia, se pasó por el lugar de celebración con la intención de acabar con la fiesta. La verdad es que después de un rato de charla se convenció de que nuestra celebración nada tenía que ver con el santo danés, ya que estaba escrito con K y se trataba de una reivindicación antiprohibicionista. Le debimos de caer bien, pues hasta volvió a mandar un mail pidiendo disculpas. Así que la K quedará… por lo que pueda pasar.
Anécdotas debéis de tener unas cuantas en todos estos años, ¿no?
Organizando algo en Galicia a 19 de enero..., sobre todo batallitas meteorológicas. De hecho, deberíamos empezar a llamar a los porros como a algún santo que coincida en verano... ¡Hazte ahí un Fermín!
Leyendo el manifiesto de este año se ve que la lucha continúa.
Por eso estamos aquí. Lejos de conseguir un mundo libre de drogas, la prohibición lo único que ha conseguido es la mayor disponibilidad histórica de sustancias psicoactivas. La prohibición, además, ha sido la responsable de la aparición de los grandes grupos criminales financiados principalmente con los beneficios del tráfico de drogas, que instauraron la violencia y la corrupción en los lugares de producción y distribución, siendo realmente las personas más desfavorecidas las víctimas, tanto de esta violencia, como de la gran cantidad de recursos destinados a la persecución y represión.
Incluso habláis con escepticismo de las propuestas de determinados partidos para regular el cannabis, ¿no significan un avance?
Los avances llegarán cuando se hable de la prohibición globalmente y no de determinadas sustancias en determinados lugares, ya que es la prohibición lo que causa los verdaderos daños, no una u otra sustancia.
Hacer una marcha festiva no quiere decir que sea una broma. La gente puede confundirse. ¿Qué les dirías a los que no os toman en serio?
Aunque seguiremos reivindicando cambios en materia de drogas con un claro carácter festivo, empezamos a estar cansados de que nuestras reivindicaciones no sean tomadas con la seriedad que se necesita al hablar de asesinatos, esclavitud, cárcel y libertad individual. Se puede ser crítico en un contexto festivo, y más en Galicia, donde reina la retranca.
¿Cómo está el movimiento galaico?
Además de Ave María de Vigo y la Xuntanza Antiprohibicionista, en Compostela, que ya no somos novedad, parece que gracias a los clubs de cannabis está resurgiendo la militancia y hay gente moviéndose por todo el territorio galaico. Hoy aquí hay compañeros de Casa María de Pontevedra, Galicanna y Club Cannabum de Coruña, y de la federación galega Galfac. Suponemos que los que faltan estarán en la convocatoria de Vigo, que en el sur también celebran su San Kanuto.