La Guardia Civil ha intervenido hace unos días un pequeño laboratorio casero en el que se producían gominolas con cannabis de forma ilegal en un chalet de Vendrell (Tarragona). En el momento de la intervención los agentes registraron la casa y detuvieron a las dos personas que estaban en su interior. Una de ellas ha sido puesta a disposición judicial, mientras que la otra ha sido puesta en libertad en calidad de investigada.
La Guardia Civil empezó a investigar la presencia de gominolas ricas en THC cuando el familiar de un consumidor denunció su existencia afirmando que su pariente era adicto a las mismas. La policía siguió el rastro de las gominolas hasta dar con el chalet en el que se producían. Allí los policías encontraron 240 gominolas listas para vender, una plantación con 74 plantas de cannabis, 12 kilos de material vegetal pendiente de procesar y algunos hongos alucinógenos.
La persona puesta a disposición del juzgado de instrucción número 3 de Vendrell ha sido acusada de un delito contra la salud pública por el cultivo, fabricación y venta de sustancias estupefacientes. Según ha publicado El Nacional, la policía cree que las gominolas se vendían únicamente en la región de Tarragona y los agentes recalcaron la similitud de las gominolas de THC con las gominolas habituales consumidas por niños.
La producción de comestibles de cannabis con formas de gominolas es un problema en los estados de EE UU en los que se ha regulado el cannabis y no se ha prohibido los alimentos con formas que resultan atractivas para los niños. En EE UU y en cualquier otro país en que se regule el cannabis podrían prevenirse este tipo de situaciones prohibiendo la producción de gominolas cannábicas bajo sanción.